El hospital Vicente López y Planes suele tener polémicas por situaciones con enfermos, pero esta ocasión, la polémica llegó a raíz de una situación con un fallecido, que fue entregado a una familia equivocada, la cual lo enterró en otro distrito. La otra familia dio los hechos a conocer y ahora el hospital no se estaría haciendo cargo del error. Tuvieron que desenterrar al óbito y traerlo a Rodíguez, pero ese no fue el final del sufrimiento de los denunciantes.En General Rodríguez hay ya una costumbre por salir en las noticias más graves o insólitas, la cual continuará en tanto sigan llegando episodios como el que le ocurrió a la familia de Digno Ordóñez, un vecino de 64 años, quien estaba hace unos meses gestionando los papeles para poder convertirse nada más y nada menos que en Presidente de la primera Sociedad de Fomento de la historia de Los Aromos, barrio del norte rodriguense y que lamentablemente falleció de muerte natural el día 24 de febrero a las 11 de la mañana.
Digno iba a ser el Presidente de la Sociedad de Fomento de Los Aromos, que venía encaminada en papeles desde octubre, aseguró Inés, su hija.
Tras la lamentable pérdida, la familia de Digno, no tuvo más que el agravamiento del dolor y más padecimientos.
Cronología:
El jueves 23 se descompensó y lo llevaron al hospital, su situación era muy compleja y quedó en Terapia, decían que evolucionaba pero con bajas posibilidades de sobrevida. En cuestión de horas decían que se aguardaba al INCUCAI porque iban a probar si el cerebro había quedado sin actividad. El viernes falleció de un paro.
La hija estaba en Lomas de Zamora y se vino hasta aquí, para cuando llegó a hacer los trámites (que se demoraron porque no estaba colocada la nacionalidad en el certificado), no pudieron terminarlos porque era fin de semana largo y recién el miércoles lograron ir a la cochería para ir por el cuerpo, pero cuando ingresaron a reconocerlo, el cuerpo no parecía el de Digno. Según el relato, el cuerpo en cuestión estaba muy avanzado en el proceso de descomposición (¿no andaba el sistema de refrigeración?) y fue muy traumático permanecer junto al mismo para establecer si era o no. Gracias a que recordaron que Digno tenía una uña distinta por un accidente, fue que lograron asegurar que no era el cuerpo. A la tercera vez que negaron recibir ese cuerpo, luego de una larga espera les informaron que el cuerpo se lo había llevado una familia el día sábado anterior.
Qué pasó con los restos de Digno:
Corría el día sábado 25 de febrero cuando en el hospital se disponían a entregar los restos de un hombre que tenía una causa fatal que requería una autopsia. El sujeto fue revisado por un familiar que lo fue a buscar desde La Matanza. Tras dar por aceptado el cuerpo, el trámite se concluyó con la salida del mismo rumbo a un cementerio en esa localidad, donde se lo sepultó.
Aparentemente, el cuerpo de Digno habría estado en un espacio por encima de los restos del otro hombre.
Lo increíble de esta historia es por un lado, que la morgue pueda haberse equivocado en el proceso de presentar un cadáver a la familia correspondiente,
pero más aún, que la otra familia haya reconocido un cuerpo que no era el de ellos y se lo haya llevado del hospital. Y todavía más raro es, siendo que digno llevaba 24 horas de fallecido al momento que lo entregaron, de modo que era reconocible perfectamente.Luego de varios días de angustia, se tuvo que mandar a exhumar los restos del cementerio matancero y se lo trasladó de nuevo a General Rodríguez, donde tras otro reconocimiento (de un cuerpo que ya había pasado varios días sin refrigeración), la familia Ordóñez lo pudo confirmar. Pero allí no termina la cuestión, ya que tras reconocerlo recién el viernes 3 de marzo, se percataron que el cuerpo habría tenido una autopsia, lo cual es para la familia, un indicio del error cometido desde el hospital, ya que la misma correspondía al hombre de La Matanza y la familia de Digno jamás había autorizado el procedimiento.
¿Batalla legal?
Inés aclaró que el nosocomio no se hace responsable por la situación y culpaba al familiar de la gente de La Matanza (que serían de apellido Villanueva) por la confusión, quizás, bajo el nivel emotivo de la situación, pero ella dice que no está dispuesta a tolerarlo y buscó o buscaría apoyo legal. Hubo excusas referidas a que la cuestión podría ser de etiquetas e insumos, algo que la familia no vio del mejor modo. Un fiscal dijo que el error de dar el cuerpo es "un error humano" y que la causa sí puede seguir por la autopsia que no debieron hacerle.
Como detalle final, más desprolijidades:
Como para terminar de perjudicar algo más a esta pobre familia, cuando le dejaron retirar a su verdadero padre, no los recibió la capilla, porque estaba muy avanzado el estado de descomposición y hasta el cura ni le hizo una oración, apuraron el trámite porque una ambulancia que lo trasladó hasta el cementerio municipal se tenía que ir.
De este modo, les dejaron el cajón cuando aún no se había terminado el pozo y se retiraron. En las fotos se ve como la familia tuvo que terminar aguardando en el cementerio las labores de los empleados para la preparación del espacio en tierra.