Heber Ríos anticipó el conflicto con el Gobierno que viene ligado al "salvataje" a SanCor

 

El acuerdo por el que el Estado ayudó con 450 millones de pesos a la cooperativa lechera tiene una condición que deberá negociarse en un tiempo y el Secretario General de ATILRA en Rodríguez aseguró que traerá nuevas situaciones tirantes.

En la agencia de noticias La Primera, se publicó una entrevista a Heber Ríos, el secretario general del sindicato de los lecheros en General Rodríguez y vocero del gremio a nivel nacional. Para él, el salvataje del Gobierno a SanCor de $450 millones de pesos pretendió ser una especie de extorsión. Según le explicó el sindicalista durante una entrevista, desde el Ministerio de Agroindustria de la Nación pretendieron atar la ayuda a la cooperativa láctea más grande del país a que los trabajadores resignen derechos y beneficios. “Cuando ya se había firmado el acuerdo entre el Estado, los directivos se SanCor y la parte gremial, salieron con una nueva propuesta de modificar artículos del convenio colectivo de trabajo. Eso claramente es una propuesta de un convenio a la baja, de quita de beneficios en varios aspectos. Ahí es donde nosotros planteamos que todo tiene un límite. Podemos entender la situación no solo de SanCor sino de la industria en general, pero ni por asomo vamos a negociar un convenio a la baja”, manifestó Ríos.-¿Ese cortocircuito fue el que generó la huelga nacional de la semana pasada?-Veníamos de varias negociaciones para intentar destrabar un salvataje al que se había comprometido el Estado. En el medio de estas negociaciones, convocan a la organización sindical, nos acercamos y ataron el salvataje a una condición. En el 2009 se firmó un acuerdo mediante el cual las empresas pequeñas, medianas y grandes hacen un aporte al sindicato de 3800 pesos por cada trabajador para reforzar la cobertura médica asistencial de los trabajadores lecheros. Ya se venía negociando con las empresas este tema porque, en su momento, se fijó un monto que se iba a ir modificando gradualmente con las sucesivas negociaciones salariales: en la misma proporción que se aumentaba el salario, se incrementaba también este aporte patronal permanente. -¿La condición era canjear el salvataje por la quita de ese aporte?El Estado y las cámaras empresarias pusieron como condición la posibilidad de replantear los montos. Se había accedido a eso en negociaciones anteriores, pero cuando ya se había firmado el acuerdo entre el Estado, los directivos se SanCor y la parte gremial, salieron con una nueva propuesta de modificar artículos del convenio colectivo de trabajo con una quita de beneficios en varios aspectos. Ahí, nosotros tomamos la determinación de la huelga general, porque creíamos que estaban tomando a SanCor y a los trabajadores como rehenes para meternos presión y negociar un convenio a la baja.-A partir de la huelga se destraba el conflicto y se firma el salvataje.-Producto de la huelga general se destraba este conflicto, el Gobierno se compromete a hacer el salvataje a SanCor, también se acuerda una reducción en los montos del aporte patronal permanente, pero se deja establecido que en un tiempo nos vamos a sentar a conversar el tema del convenio. Nosotros lo tenemos súper claro, desde las cámaras empresarias van a proponer un convenio a la baja y nosotros obviamente no lo vamos a aceptar, así que eso va a ser un punto de conflicto dentro de un tiempo seguramente. Quedó establecido que, dentro de un plazo de 30 días desde la firma del convenio, se van a empezar a sentar las partes. No vamos a ser cómplices de un convenio a la baja.-¿A qué se debe, desde su punto de vista, el colapso de SanCor?-La situación se debe a la ineptitud de los directivos. Malas determinaciones, malas decisiones sobre las inversiones. No podemos señalar que hubo cosas oscuras ni nada por el estilo, de eso se tendría que encargar de investigar la Justicia o de controlar el Estado, porque los $450 millones del salvataje van a ir a un fideicomiso y el Estado se va a encargar de controlar a dónde se destinan los recursos. Con el tiempo va a quedar demostrado que no pasa ni por el aporte patronal permanente, ni por el convenio. Todos dicen que los trabajadores lecheros tienen un salario alto y nosotros decimos que tenemos un salario digno, somos conscientes de la rentabilidad del producto. El impacto de la mano de obra dentro el precio del producto final es de entre un 17 y un 22%. No pasa tanto por los salarios sino porque el sector lácteo en general está atravesando una situación complicada porque no hay producción de leche, cada vez hay menos tambos, hay una caída de consumo de leche del orden del 25%.-¿Cómo se revierte la situación del sector?-Reclamamos desde hace tiempo una participación activa del Estado en políticas serias de lechería. Un tambo hoy recibe entre 5 y 6 pesos por litro de leche y uno ve la leche en las góndolas a 22, 23 o 24 pesos el litro. Los grandes supermercadistas son los que terminan fijando el precio. Con un rol activo de Estado, esto se puede mejorar y que cada uno reciba lo que lo que le corresponde. Cuando no hay reglas claras en el negocio, pasa esto y resultan siempre favorecidos dos o tres pícaros.-¿Cómo analizan el panorama salarial de los lecheros para este año?-El 30 de abril se venció el último acuerdo salarial y ya estamos en condiciones de convocar a las cámaras empresariales para negociar el nuevo incremento. El año pasado, lo hicimos en dos tandas semestrales debido a que había incertidumbre, tanto para las cámaras como para los trabajadores, sobre cuál iba a ser el porcentaje real de la inflación, más allá de que el Gobierno hablaba de un 25% anual. Nosotros entendíamos que no estaban dadas las condiciones para eso y entonces fijamos un primer aumento de un 23% para el primer semestre y para el segundo semestre conseguimos un 13,8% sobre ese 23 que habíamos conseguido. Entendemos la situación de SanCor y del sector en general, pero nosotros estamos para representar los intereses de los trabajadores lecheros y así lo vamos a hacer.