Junto a la otra concesionaria del servicio eléctrico, Edesur; la empresa desarrolla una iniciativa que puede llegar a generar grandes cambios para los usuarios. Por ahora, está en un período de prueba.
Días atrás, trascendió a través de un artículo de La Nación, una iniciativa que planean aplicar Edesur y Edenor, las empresas concesionarias del servicio eléctrico en Capital Federal y Gran Buenos Aires.
Se trata de la instalación de medidores inteligentes, con tecnología más avanzada que los actuales, que permitirán no sólo contabilizar el consumo de electricidad sino también la cantidad de energía que sale a la red. La iniciativa va acompañada por el marco legislativo, ya que en la Cámara de Diputados se le dio media sanción a un proyecto que propone habilitar a usuarios residenciales y del sector privado a producir su propia energía sobre la base de recursos renovables. Es decir, aquellos usuarios que decidan invertir en paneles solares en su propiedad, podrán comercializar su propia energía.
Edesur tiene un plan ambicioso: tener instalados 5000 de estos medidores para fin de año. ENEL, dueña de la empresa, ya tiene antecedentes positivos respecto de esta medida en otros países donde opera como Perú, Chile y Colombia. En Italia, nación de origen de la compañía, reemplazó en tres años unos 30 millones de medidores y hoy hay 400.000 pequeños distribuidores que aportan a la red 25.000 MW al sistema en pico de generación, la mitad de lo que necesita el país.
Edenor, por su parte, instaló en mayo 30 de estos aparatos en Vicente López y Olivos para probar el sistema y planea, de obtener resultados positivos, encarar un desarrollo similar.
Pero, no sólo la posibilidad de vender electricidad es la que traerán consigo estos nuevos medidores. También permitirá a la empresa detectar de forma inmediata cuándo hay un corte en la red de baja tensión (el tipo de cable que llega a los hogares), dado que hoy sólo lo hacen con los de media y de los de baja tensión tienen aviso cuando el usuario realiza el reclamo. Sería un cambio de paradigma que, indudablemente, con una respuesta a la altura de las circunstancias, se notaría y mucho en General Rodríguez, donde se espera que las obras en la ampliación de la subestación eléctrica comiencen a traer las primeras mejoras de un servicio muy criticado por la frecuencia de los cortes (muchas veces no informados por los canales de comunicación de Edenor), desde los de media tensión hasta los populares "microcortes" que afectan a miles de familias a veces durante semanas.
A través de estos medidores, la empresa también podrá revisar el consumo de manera remota, sin necesidad de que pase el personal a hacer la lectura del medidor. Dichos empleados serían capacitados para hacer otras tareas que sirvan para solucionar los inconvenientes en el servicio.