Fue hace unos días en el espacio que funciona en el Club Costa Brava, ubicado en las calles 2 de abril y Demaestri. Los delincuentes ingresaron por una de las ventanas.
El último lunes 22 de enero por la mañana, poco después de las 8 horas, el judoca Iván Duarte comprobó que su gimnasio había sido robado. El lugar de entrenamiento funciona en las instalaciones del Club Costa Brava, ubicado en las calles 2 de Abril y Demaestri.
Allí, encontró todo el gimnasio desordenado y el faltante de dinero en efectivo que se encontraba en la caja, un equipo de música nuevo que habían adquirido recientemente y casi todas las bebidas que se venden en el local. "La heladera estaba casi vacía", dijo el reconocido deportista local, que cree que los delincuentes se tomaron su tiempo ya que también desordenaron el resto de las instalaciones de la entidad deportiva aunque sin llevarse nada más.
Al parecer, habrían ingresado por una de las ventanas. "Nosotros nos fuimos el sábado a la tarde y vinimos a abrir el lunes a la mañana, por lo tanto no sabemos si fue durante la noche del domingo o la del sábado", manifestó Duarte, que también aclaró que hizo la denuncia policial correspondiente.