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Tras la tormenta del viernes, parecía que lo peor fueron los milímetros de agua que inundaron por un par de horas partes del centro y de algunos barrios, sin embargo, llegaron imágenes que mostraron voladuras de techos y roturas en varios puntos. Hubo daños en vivendas de Solares del Oeste y se supo que un jardín también tuvo problemas a raíz del temporal.
En los últimos años, la ciudad fue afectada numerosas veces por inclemencias climáticas y en esta ocasión, el viernes pasado hubo un chaparrón de mucha fuerza que inundó calles céntricas por la enorme caída de agua en pocos minutos, pero no se habían visto más imágenes sobre el impacto que había dejado en la infraestructura de algunos barrios el viento que se había levantado.
La Secretaría de Planificación de Obras, Infraestructura y Servicios Públicos estuvo este fin de semana en Solares del Oeste, barrio que se vio muy afectado tras la tormenta del último viernes 23 y se publicaron fotos de la manera en la cual se afectaron edificios de vecinos.
Como se puede ver en las imágenes, hubo techos y frentes de hogares dañados, los cuales debieron ser extraídos de los mismos y reinstalados, o directamente, comenzar la construcción de nuevos.
Trascendió que se afectaron instalaciones del jardín 906 en Malvinas y que hubo más puntos con problemas. A diferencia de otros temporales, se habló menos de este, sin embargo los efectos dejaron sus huellas. Tras un par de meses de sequía, comenzó el cambio de temperaturas y las lluvias ya generan preocupación, como viene pasando por el cambio climático, afectando los territorios con fuerzas cada vez más intensas.
Sería un buen momento para planear una organización ante algún tipo de inclemencia mayor, como las que han pasado años anteriores y llama la atención que aún nunca el municipio haya colocado pluviómetros para medir la caída de agua y poder conocer qué nivel de precipitaciones vienen sucediendo, para tener un estudio a la altura del planeamiento futuro del distrito. 
