La Guardia de Ordenamiento Urbano labró actuaciones por irregularidades en la vía pública, y la empresa habría avanzado en el pago de actas pendientes pero deberá afrontar una importante multa vinculada al predio de la calle Manny que utilizó durante varios años.
La Guardia de Ordenamiento Urbano (GOU) informó recientemente que procesó a la empresa de colectivos La Perlita S.A. por utilizar la Avenida Bernardo de Irigoyen como playa de estacionamiento y, a su vez, arrojar en ella los residuos -papeles, bolsas, latas, botellas y hasta pañales, entre otros- que sean extraídos del interior de los vehículos.
Desde dicha área, dependiente de la Subsecretaría de Inspección General, consideran que la compañía debería contar con una playa privada de estacionamiento y mantenimiento de los coches alejada de las zonas residenciales y de alto tránsito, donde puedan efectuarse este tipo de labores de limpieza sin ocasionar molestias ni contaminación. Meses atrás,
se había dispuesto la clausura del predio que La Perlita utilizaba para guardar sus unidades en la calle Manny y que, según la Comuna, nunca había sido habilitado y se encontraba con ciertas irregularidades.
Ante esto, la GOU comenzó a multar a la empresa, pero las infracciones continuaron sucediendo. A su vez, se sumó un accidente de tránsito ocurrido el pasado domingo 6 de mayo en el que una unidad colisionó con una moto y el chofer fue demorado por conflictos con el personal de Tránsito al tiempo que el vehículo terminó siendo secuestrado.
Finalmente, el viernes pasado -11 de mayo-, las autoridades el organismo municipal habrían mantenido reunión con el Secretario Legal y Técnico, Alberto López, que informó que los representantes legales de la empresa se presentaron en el Juzgado de Faltas para tramitar el levantamiento de una medida cautelar tomada luego del siniestro antes mencionado y que incluía la retención del colectivo de la eempresa.
El predio de La Perlita sobre la calle Manny. La empresa deberá buscar otro lugar donde guardar sus colectivos.
Pero el Juzgado de Faltas consultó el Registro de Antecedentes de La Perlita y, según mencionaron desde la GOU, éste registraba varias causas pendientes por infracciones relativas al Ordenamiento Urbano. Según se pudo averiguar, para liberar la unidad secuestrada, la compañía debió abonar el monto punitivo por el siniestro y por lo adeudado con una suma cercana a los $350.000. Desde la empresa expresaron la voluntad de avanzar con los pagos para cumplir con sus responsabilidades en el distrito.
Más allá del importe abonado, a La Perlita le quedarían otros $250.000 para "ponerse al día" y, además, deberá afrontar una multa de $500.000 por los incumplimientos del contrato de concesión con la utilización del predio de la calle Manny donde se guardaban los colectivos y que nunca contó con las habilitaciones correspondientes. Había sido clausurado, y la medida fue confirmada por el Juzgado de Faltas para pasar a ser evaluada por el Juzgado Correcional de Mercedes, donde en unos diez días se reconfirmará la sentencia por la cual la compañía de transporte no podrá volver a hacer uso de ese lugar. De todas formas, aunque la empresa podría correr riesgo de perder la concesión del servicio de transporte en el distrito si la multa no es abonada y continúan los incumplimientos, desde el Municipio aclararon que "no hay animosidad contra La Perlita" y se evaluará la predisposición que ésta muestre en adecuarse a las normas establecidas en convenio.