Sin límite: Una carta y un llamado tuvieron en alerta a cinco escuelas

Lo que comenzó siendo un problema de una escuela sola se ha extendido paulatinamente a varias instituciones más. Hubo un caos este mediodía por tratar de asistir simultáneamente a varios establecimientos y la cúpula de Seguridad evalúa acciones de la fiscalía.Este mediodía, quien pasó por la plaza habrá visto un despliegue enorme de chicos y escuelas, con lo que significa adelantar la salida del alumnado de muchas escuelas céntricas y sus riesgos. Todo este desorden comenzó por la mañana luego de que alguien hallara en la puerta de ingreso de la Secundaria N°6 (del otro lado de la manzana de la Escuela Primaria N°1) una amenaza de bomba escrita que aseguraría que en uno de los salones de 1° año de la "EESN°1", estaría un explosivo. Esto hacía pensar que o bien se referían a la EESN°6, que está pegada a la Escuela N°1 PRIMARIA y era un error, o podría tratarse de una amenaza a las demás instituciones. Sin embargo, pasado el mediodía ingresó un llamado al 911 dando una amenaza para la Escuela Media N°1, de la calle Alem. A su vez, en el mismo mensaje escrito en una hoja cortada, encabezado con los números 11.11 (el horario), decía que la amenaza corría también para el Parroquial, el Mixto y el San José. El manuscrito llegó a las autoridades escolares, que llamaron al Centro de Monitoreo y desde allí se convocaron a los bomberos (alrededor de las 11:30 am) a realizar una búsqueda. Luego se alertó tanto a la EESN°6 y a las instituciones privadas para realizar búsquedas simultáneas, pero a esas no asistieron bomberos locales, aunque desde Monitoreo se revisaron las aulas de cada institución con personal de explosivos para los peritajes. Ya todas fueron investigadas, con resultados negativos.Hay informes que indican que no todas se evacuaron y otros que dicen que sí. Dado que algunas instituciones, llegado el mediodía, liberan a muchos alumnos de todos modos, habrá que aguardar a ver con autoridades escolaraes, más tarde. La cuestión de la investigación quedó a cargo de la Comisaría 1°, pero todo el distrito estaría en alerta. Había mucho enojo y preocupación y al extenderse tanto, habrá que esperar para ver qué nivel de respuesta toma la fiscalía interviniente, que en primeras consultas, aún aguarda que le lleguen datos informáticos de las primeras amenazas de hace dos semanas. Por lo pronto, hay algo que queda claro, todos los problemas nacen en la EES6, con sospechas que aún no quedan claras respecto de las intenciones y el método, que era de llamados, ahora pasó a ser un manuscrito, lo que también llama la atención, pero quizás tenga relación con las alertas hasta dentro del mismo establecimiento, que se difundieron a alumnos asegurando que podían haber reprimendas de las autoridades policiales y hasta multas si se encontraban a los responsables. Dado que los llamados pueden ser rastreados, los perpetradores decidieron continuar este juego macabro, a través de un medio que no tenga un rastreo electrónico. De todos modos, un papel también puede dejar sus pistas. La Escuela N°6 ya tuvo cuatro amenazas a la institución en dos semanas y media y este episodio, donde no se mencionaría la amenaza a la misma escuela, sino a otras. El llamado del mediodía, por su parte, deja un registro, de modo que se sumará al trabajo de investigación que ya había empezado antes, incluyendo a la Escuela N°6, otras barriales y ahora la Media N°1. ¿Terminará este flagelo o seguirá mucho tiempo más? La preocupación de los padres es creciente y pasadas las 13 hs habían algunos que aún no sabían si llevar a los hijos a las escuelas amenazadas. Muchos teléfonos de autoridades no podían dar respuesta en el momento de colapso y se generó un vacío de información que se alargó casi dos horas. Salvo por la respuesta del COM una vez terminada la revisación, no hubo datos oficiales hasta que todo ya estaba disipado. La otra excepción la dio el Consejo Escolar, en su titular, Estela Cacace que brindó la poca información a la cual se pudo acceder durante el mediodía. Sin dudas habría que implementar un protocolo para poder comunicar rápidamente a la sociedad cuando suceden situaciones así, porque la cantidad de gente que tiene miedo, nervios o tiene que cambiar toda su rutina para ir a buscar a sus hijos o decidir qué hacer, lo merece.