El Lechero ganaba bien ante el puntero del campeonato, pero un polémico arbitraje de Gastón Iglesias inclinó la balanza en contra.
Por la fecha 17 de la Primera C, Leandro Nicéforo Alem visitó a Deportivo Armenio con la ilusión de sumar de a tres y seguir prendido en el lote de los de arriba.
Estuvo muy cerca ante un rival con un plantel de mucha calidad y experiencia que lo mantiene en lo más alto, pero a eso, ayer, domingo 25 de noviembre, se le sumó que fue claramente favorecido por los fallos arbitrales que desataron la ira del club rodriguense.
El equipo del "Lobo" Cordone había realizado una primera parte muy buena, jugándole de igual a igual a Armenio, y hasta superándolo en varios pasajes del juego. Así, a la salida de un lateral, Walter Gallardo la guapeó en el área y metió un derechazo que sorprendió al arquero Oviedo y puso arriba al Lechero. Con esa ventaja favorable llegó el entretiempo.
Y fue en el complemento cuando el trámite dejó de ser parejo: Iglesias consideró una falta de Iván Junco como merecedora de la segunda amarilla, y dejó a Alem con 10. Ante esto, el "Lobo" no lo pensó mucho y puso a Alcaraz por Víctor Meza, gastando casi obligadamente su segundo cambio de la jornada (en la primera etapa había entrado Ramasco por Cordero, lesionado).
Más allá del hombre de más y el juego volcado todo en ataque, Armenio no tenía ideas para romper una defensa que dejaba la vida en cada pelota. Sin embargo, continuaron las polémicas con algunas infracciones que cobraba Iglesias cerca del área, y el punto máximo llegó a los 27 del complemento.
Una volea pegó en el pecho del recién ingresado Alcaraz y el juez, sin dudarlo, sancionó un insólito penal que despertó la bronca de todo el plantel Lechero. El arquero y capitán Claudio Paz amagaba con retirarse del estadio, Cordone no lo podía creer y los jugadores estallaron del enojo. PERO POR UN INSTANTE SE HIZO JUSTICIA, ya que tras varios minutos de interrupción, el eterno guardameta adivinó la intención de Santiago Gómez, el que se hizo cargo de ejecutar la pena máxima, y le contuvo el remate.
Inmediatamente el juego se detuvo por una agresión al juez de línea que estaba de espaldas a la popular de Armenio, pero todo quedó en la nada. Alem aguantaba con un despliegue físico descomunal que empezó a pasar factura. Y a los 40, Víctor Piriz Alves ganó en el área y metió un cabezazo excelente, que pegó en el travesaño y se clavó en el fondo del arco de un Paz que esta vez no pudo hacer nada.
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Alem estaba agotado física y mentalmente, y Armenio, envalentonado. En los 8 minutos que se jugaron de alargue, el local terminó encontrando el gol del triunfo en una media vuelta de Javier Molina que se clavó en el palo derecho.
El club rodriguense se fue con mucha bronca por haber dejado todo y por haberse sentido perjudicado por un arbitraje que, en gran medida, lo fue metiendo en su arco.
Y en las últimas horas, emitió un descargo ("MARCÁ AL DE VERDE") en sus redes sociales en el cual apunta directamente contra Gastón Iglesias: