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Los festejos veraniegos durante los últimos años han reincorporado con fulgor la actividad murguera en el distrito, sin embargo, a pesar de los cientos de chicos que se divierten, algunos grupos se han vuelto un tanto incontrolables y el sábado pasado, no fue la excepción.El sábado pasado, desde la tarde se iniciaron las actividades de las murgas barriales que se convocan en el Predio de la Estación para bailar y llevar toda su preparación anual, que incluye el instrumental, la vestimenta, las canciones y las coreografías que se enseñan en cada murga. Sin embargo, como también es costumbre, la juventud actual también sufre de conflictos que se generan durante todo el año, pero que se notan más en estas fechas. No es nuevo que los adolescentes sean difíciles de controlar o que haya algunas escenas de violencia, pero realmente hay muchos otros chicos que a pesar de querer participar, eligen no ir, por algunos hechos lamentables y el temor a una situación más grave. Durante la noche del sábado se reportaron peleas sobre la Av. Bernardo d e Irigoyen, corridas, amenazas y algunos objetos aventados. En un comienzo pareció que se descontrolaba peor, pero por suerte se paró a tiempo. De todos modos, una situación que trascendió era el enojo del director de Transito con algunos efectivos por no haber realizado una mejor distribución de los recursos entre los adolescentes, especialmente refiriéndose a algunos agentes nuevos que se incorporaron a la fuerza desde la ya extinta "Policía Local".
No fue lo único que sucedió, puesto que también hubo algunos robos de bienes menores, especialmente alguna cartera que otra. Puntualmente el medio habló con Xoana, quien explicó que dos menores de edad (de 15 a 16 años) le arrebataron su bolso y huyeron y que esto le ocurrió a otra chica más. En el bulevar de la Av. 25 de Mayo hubo algunos chicos discutiendo si iban o no a ir a buscar a otro grupo. Antes de eso se habian visto corridas por el parque.
En años anteriores hubo hechos violentos para esta época, algunos, con decenas arrojándose proyectiles y habrá que tener atención para evitar males mayores, principalmente, con los padres estando más cerca de los puntos de encuentro masivos, para estar más al tanto de lo que hacen, especialmente en grupo, que es donde se generan los disturbios más graves. Lo mismo, para las fuerzas de seguridad, que muchas veces no saben exactamente cómo resolver estos hechos sin arriesgarse a tener un sumario y más de uno trata de evitar intervenir hasta últimas instancias, este es un especto legal que también sería necesario dar a conocer.
En pocos días vendrán más corsos y la gran fiesta del carnaval, si cada uno hace su parte, podrá ser una verdadera fiesta. Si no se acciona mejor, podría terminar como en 2017 (ver enlace), o peor.