La oficina local, ubicada sobre la calle Almirante Brown, seguirá sin atención al público por octavo día consecutivo. Si bien hubo diálogos, le medida de fuerza seguiría vigente hasta que haya resolución del reclamo gremial de la Asociación de Trabajadores del Estado a raíz del despido "injustificado" del empleado.
Mañana, martes 22 de octubre, la oficina local de ANSES estará cerrada al público por octavo día consecutivo a raíz del reclamo gremial de la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) exigiendo la reincorporación del empleado Pablo Parra tras su despido que fue considerado "injustificado". El reclamo incluirá una movilización que iniciará en la Plaza Central a las 10 horas e irá hacia la sede del organismo en la calle Almirante Brown a metros de Av. Bernardo de Irigoyen.
El paro en la sede local se había iniciado el pasado viernes 11 de octubre tras conocerse la noticia del despido del trabajador, que además es delegado de ATE allí y secretario de Acción Social del gremio. Las jornadas de reclamo incluyeron corte de tránsito en Almirante Brown y también en la Av. Bernardo de Irigoyen.
En los distintos días de reclamo, hubo presencia de Policarpo Sosa, secretario general de ATE y el apoyo de concejales como Carlos Paz, Manuel Anigstein y Reinaldo "Cartu Torres" (Frente Todos) y del gremio UPCN (Unión del Personal Civil de la Nación). Existió diálogo con Jorge Aguirre, jefe regional de ANSES, representantes del Consejo Directivo Nacional del gremio y con los funcionarios Gustavo "Baby" Gómez y Juan Ignacio Hayden pero no hubo avances para resolver el conflicto. Desde ATE habían deslizado días atrás que habría un compromiso desde el Municipio para intentar contactar al presidente de ANSES, Emilio Basavilbaso, para tratar de destrabar la situación. Este lunes 20 de octubre circuló que hubo conversaciones con gerentes de Recursos Humanos del organismo pero al parecer todavía no habría avances sustanciales.
El despido, según Pablo Parra y la gente de ATE, constituye una “persecución política”. El empleado, que supo ser jefe de la dependencia local, ya había sido despedido en 2016 y la Justicia lo había reincorporado ocho meses después tras una cautelar desde el sindicato. Parra comentó a La Posta que desde ANSES habrían notificado que consideran que la reincorporación era temporal, “desconociendo mis derechos de empleado público y de planta permanente” y sin seguir ninguno de los mecanismos que se requieren para cesantear a un trabajador estatal.