Él, un hombre de 32 años con retraso madurativo que su familia buscaba desde el 17 de diciembre; apareció en un hospital de Avellaneda el jueves 26. Ella, en tanto, desapareció ese mismo jueves y apareció el sábado 28; se investiga si hay un caso de violencia de género que influyera en su ausencia de dos días.
Encontraron a Sergio, el rodriguense que estaba perdido desde antes de Navidad
Sergio Román (32) apareció internado en la cama 4 del servicio de Clínica Médica Hombres del Hospital Interzonal General de Agudos “Presidente Perón” de Avellaneda, en el Sur del Gran Buenos Aires el último jueves, 26 de diciembre. Padece retraso madurativo y un síndrome compulsivo y era buscado desde el martes 17 cuando, según había denunciado su hermana, Johana, ese mismo día se había dirigido hacia la casa de su tía en el barrio Altos del Oeste, pero nunca regresó a la suya y desde entonces nadie sabía nada sobre su paradero.
Fue ese jueves 26 cuando el portal Multimedio En La Mira difundió la imagen de Sergio en el hospital avisando que no sabían su identidad y que se estaba tratando de ubicar a algún familiar o allegado. Inmediatamente la familia de Sergio pudo ver esa publicación y acudir al lugar a su encuentro.
A continuación, la publicación del portal avellanedense:
Lucia Galarza apareció luego de dos días e investigan violencia de género
El último sábado, 28 de diciembre, la secretaria de Seguridad y Justicia municipal, Ana María Mottino, confirmó la aparición de Lucía Alejandra Galarza, madre de cuatro hijas menores de edad (de 4, 6, 10 y 15 años).
Según afirmó la funcionaria, se pudo dar con el paradero de Lucía "gracias a la articulación de diferentes organismos estatales y la ayuda de vecinos y vecinas". Asimismo, añadió que la mujer de 35 años "contó su odisea con su pareja en el marco de la violencia de género". Desde el entorno de Galarza comentaron a La Posta que se habría encontrado en Pilar mientras la buscaban, aunque no hubo muchos detalles de cómo la hallaron.
En este contexto, La Posta tenía como dato que Lucía vivía con su pareja actual, quien habría sido el único que la vio por última vez y que radicó la denuncia policial. Ella habría salido de su casa “para caminar y pensar” y nunca más regresó. También se supo que su pareja había estado demorado en la Comisaría (se cree que como medida preventiva) aunque habría sido liberado horas después y la habría buscado a Lucía junto con la hija adolescente de ella.
No se descarta la posibilidad de una situación de violencia de género que pueda haber influído en su desaparición. Mottino aseguró que "se pasó a considerar la intervención inmediata de la directora de Género a los fines de dar tratamiento al caso".