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El dramático episodio tuvo lugar en la jornada del miércoles. La abuela de la recién nacida dialogó con La Posta y relató la increíble situación que vivió junto a su nuera.
Emily nació el miércoles 24 de junio de 2020. Afortunadamente, llegó al mundo con buenas condiciones de salud. En este momento, se encuentra en los brazos de su madre Iara (18 años), primeriza, en el Hospital Vicente López y Planes. Sin embargo, su nacimiento se dio en el marco de una situación dramática e insólita. Según cuenta su abuela, Claudia, vecina de barrio Bicentenario y madre de cinco hijos, no recibió la atención necesaria por parte del equipo sanitario del nosocomio ni del Sistema de Atención Médica de Emergencias (SAME).VEA EL VIDEO DE LA ENTREVISTA:
https://youtu.be/NYzXS6GvGpY “Estuvo toda la mañana descompuesta. La contuve en casa hasta las tres de la tarde, que no aguantaba más y ahí le dije ‘bueno, vamos’ porque si no vas con muchas contracciones no te van a atender. Vinimos a la guardia médica, nos mandaron a la carpa blanca donde nos dijeron que nos tienen que tomar la temperatura para poder circular dentro del hospital. Vamos allá, no hay nadie, vengo y aviso que no había nadie ahí, y nos dicen que esperemos”, comenzó relatando Claudia a La Posta.“Estuvimos desde las tres de la tarde hasta las cinco para que venga alguien a tomarnos la temperatura para poder entrar al hospital. Así fue el primer paso. Había diez personas, todos afuera. Encima hacía mucho frío, y había solamente una chica policía”, describió. “Según ellos estaban atendiendo y no podían salir a atendernos porque no había médicos”, contó.Luego, tras dos horas, “llegó alguien y le tomó la temperatura y nos mandó para ginecología”. “Nos fuimos para ginecología, tocamos timbre, no nos atendió nadie y tuvimos que estar esperando una hora más”, dijo, hasta entonces, la futura abuela, y añadió: “Nos atienden, la revisan, le hacen el monitoreo fetal y le dicen que tiene 3 de dilatación y que tenía que tener 10 para que la dejen internada. Entonces, nos mandaron a casa”.A todo esto, “ella estaba muy adolorida. Llegamos a casa y le dije que se acueste un rato y se calme… También le dije que se pegue una ducha para relajar la cintura y el cuerpo”, afirmó. Habrá pasado poco más de media hora de haber vuelto del hospital, según Claudia, que Iara “entró a bañarse y rompió bolsa. No quedó otra que asistirla ahí”, apuntó la vecina de Bicentenario, quien además señaló: “Llamé a la ambulancia y me dijeron que tenían entre hora y hora y media y que no podían venir. Le dije que rompió bolsa y la tengo en el baño tirada y me dijo ‘no tenemos ambulancia’ y me cortó”, contó indignada y desesperadamente. “Tuve que armar todo en el baño e ir pidiéndole a mis hijos que estaban ahí, asustados, ella también porque tiene 18 años… Con todo el miedo y todo el dolor que eso conlleva”, continuó. “Le dije que se quede tranquila y que puje porque ya estaba la cabecita asomando”. En este contexto, cabe destacar el accionar de Claudia en el parto de su propia nieta, sobre la cual precisó: “Salió la bebé, se la limpié un poquito con la toalla, le puse una manta de algodón y se la puse en el pecho. Lloró al ratito, le tocaba el pechito para que llore... Mi nuera lloraba también, no sabía qué hacer, qué le estaba pasando, entre la emoción y el miedo…”, recordó.Y resaltó: “Le pedí bolsas a mis hijos para meter la placenta adentro, porque no le corté el cordón umbilical”. Por milagro, la beba está bien. ¿Pero si hubiese habido una complicación? Hasta que, finalmente, dijo que luego de más de 60 minutos de espera, arribó a su domicilio una ambulancia del SAME: “Me pudieron asistir, pero ya estaba todo hecho. Así que llegaron, a la hora y media más o menos, y no quedó otra que llevarnos a la ambulancia y nos vinimos para acá (para el Hospital Vicente López y Planes)”, subrayó la flamante abuela. Sobre el estado de su nuera, remarcó: “Ella está más tranquila, pero nos sentimos nerviosas igual. Es peligroso lo que pasó”. Y agradeció: “Tenemos que agradecerle a la vida porque estamos bien”.Por último, emitió un pedido a las autoridades para que este tipo de situaciones no ocurran más en el distrito, porque en esta ocasión la tuvieron que vivir su nuera y ella, pero podrían haberla atravesado otras madres rodriguenses. “Estaría bueno que tomen cartas en el asunto y que hagan algo, porque creo que ambulancias acá hay de sobra. Conté nueve… Es más, cuando vine anoche con otra ambulancia para que la asistan estaban las cinco ambulancias estacionadas ahí y me parece una falta de respeto que te digan que no tienen ambulancia y vos llegás acá con otra y hay cinco estacionadas…”, cerró.Un Estado que desmiente y no se hace cargo
El SAME tiene en el distrito tres ambulancias, las demás son de traslados y otras funciones, en eso, la vecina desconocía que la cantidad de ambulancias del servicio municipal son tres y sólo una está ubicada en el nosocomio, pero según recientes declaraciones oficiales del concejal Reinaldo Torres, el Municipio dice que las planillas del SAME aseguran que no se demoró tanto tiempo la ambulancia, ya que el edil dijo en una entrevista radial que el llamado fue a las 20:12 hs y que la ambulancia salió a las 20:18 hs y llegó a la vivienda a las 20:25 hs, para luego arribar al nososcomio a las 20:44 hs.