El Servicio Alimentario Escolar, que asiste con bolsones de alimentos a unas 15 mil familias, registró inconvenientes el martes y miércoles. Primero, sin realizar la entrega habitual de alimentos y al día siguiente, con demoras que provocaron extensas filas de gente y amontonamiento en plena cuarentena.
Desde el inicio de la pandemia, el SAE entrega bolsones de alimentos a las familias de alumnos asignados al comedor escolar de los distintos establecimientos educativos del distrito.
Según lo que pudo consultar La Posta con fuentes oficiales, hasta el mes pasado se hacían entregas quincenales y a partir de julio se realizarán de forma mensual.El martes 14 de julio, docentes y directivos de escuelas debieron decirle a los vecinos que se habían acercado para llevarse su bolsón, que no habría entrega. Además de la queja de las familias que volvieron a sus casas con las manos vacías, hubo enojos en algunas escuelas dado que el aviso se habría hecho minutos antes al horario en que tenia que comenzar el reparto de mercadería.
Este medio realizó consultas a las autoridades y nos comentaron que la situación se debió a que
"se generó una nueva licitación y el proveedor está aprendiendo a desarrollar un sistema acorde a los cronogramas de entrega". Si bien se preguntó, por el momento no hay fecha para cumplir con la entrega de alimentos que quedó pendiente.
Ayer, miércoles 15, se registraron demoras y
las filas de vecinos alcanzaron las dos cuadras de extensión en algunos establecimientos como la Escuela N°9. El camión de la empresa proveedora de la mercadería, trascendió que debía llegar aproximadamente al mediodía. Hubo gente que se retiró alrededor de las 13 horas y volvió más tarde, y otros que se quedaron y esperaron hasta las 17 horas cuando finalmente arribó el vehículo con los alimentos.
Desde el oficialismo salieron distintas versiones para justificar la demora y el desorden, aunque esto no cambió el malestar entre las autoridades escolares y quienes manejan el servicio alimentario, pero especialmente, de los padres que salieron con múltiples publicaciones de redes sociales con su descontento.
Por parte de la oposición, la que se manifestó fue la ex titular del SAE de la gestión pasada, la nutricionista y actual concejal, Laura Coratti, quien recordó "cuando estaba yo me hacían problema por si dábamos una mandarina o dos". La polémica podría no quedar en este punto.
A su vez, la Escuela José Hernández publicó ayer que recibieron sólo 169 bolsones para una matrícula de 1500 estudiantes, con una base de 600 casos de necesidad. Para poder paliar la situación, las autoridades definieron dar un bolsón por familia en vez de uno por estudiante, para poder abastecer de un mínimo para alcanzar a más familias. Los comentarios de los vecinos, eran en favor de los directivos de la escuela.
ROMEDUVATO SRL
La empresa proveedora, ganó la licitación y prestará servicio en julio, agosto y septiembre por un contrato de más de 67 millones de pesos. Ya había prestado servicios en el Gobierno de Kubar (no en el SAE), y en el SAE durante la etapa de Anghileri.
Ahora, la empresa de origen lujanense tiene la licitación, pero habrá que ver si se pueden evitar estas situaciones dada la gravedad del momento de la ciudadanía a nivel alimentario y la facilidad con la que se esparce el virus, que lleva a la gente que va a buscar los bolsones a arriesgar su salud en pleno pico de la pandemia.
Publicación desde el descontento y sospechas: