Coordinadora de enfermería del nuevo hospital: "No le perdemos el respeto al virus, pero sí un poco el miedo"
Se trata de Vilma Galván, enfermera desde hace 20 años y con amplia experiencia en Terapia Intensiva -tanto en el Hospital Sommer como en el Vicente López y Planes- y Unidad Coronaria.
Tras el acto inaugural del Hospital Modular para COVID-19, La Posta Noticias dialogó en exclusiva con Vilma Raquel Galván, la coordinadora del equipo de enfermería del flamante establecimiento sanitario.
A modo de presentación, Galván indicó que además se desempeña en los nosocomios Sommer y Vicente López y Planes, en ambos en el área de Terapia Intensiva y a continuación contó cómo se le presentó esta oportunidad: “Hace 20 años que soy enfermera. Mis comienzos fueron en el Sommer y luego pasé por otros lados, donde estuve 10 años en Unidad Coronaria. Cuando se presentó este proyecto, presenté mi currículum para venir a trabajar con mis compañeros de Terapia, porque necesitaban enfermeros de Terapia. Un día me llamaron y me estaban ofreciendo el puesto de coordinadora”.
Desde entonces, continuó, “venimos trabajando desde mayo. Todo el personal que tenemos acá está capacitado, tanto el de Terapia como el de Clínica Médica. Tenemos un grupo humano muy bueno, todos profesionales y muy jóvenes”.
Respecto de sus sensaciones personales, dijo: “Para mí esto es algo muy especial y de muchísima responsabilidad porque son 60 los enfermeros que tengo que cuidar. Los primeros días después de que me ofrecieron el puesto no dormía porque me la pasaba trabajando y de una pila enorme de currículums los leía uno por uno porque quería estar segura de que el personal que esté acá, en cada sector, esté capacitado”.
En otro orden, Galván se refirió a la situación sanitaria actual y cómo se preparan para lo eventual: “Lo peor ya pasó, que fue marzo. Cuando arrancamos marzo en las otras terapias hemos tenido momentos de angustia, hemos pasado momentos en los que teníamos miedo de llegar a nuestras casas y contagiar a nuestra familia. Ahora como que ya estamos adaptados, como que nos estamos acostumbrando a eso. No le perdimos el respeto pero sí un poco el miedo. Pero si hubiésemos empezado acá en marzo… Fue muy duro para todo el equipo, tanto médico como de enfermería”, sostuvo.
Y reflexionó: “Gracias a toda la organización y cómo se viene manejando esta pandemia acá en Argentina estamos bien. Podría haber sido una catástrofe como en otros lados y no lo fue, pero están aumentando los casos”.
No obstante, aseguró que “esto está preparado para recibir a muchos pacientes. Tenemos todo el equipo, pero estaría bueno si no se llena. Estamos preparados para recibirlos y trabajar con los que tengamos acá adentro”.
Por otra parte, describió cómo es el trabajo del profesional al momento de una emergencia: “Es dinámico, pero siempre. En el momento de vestirse y desvestirse, somos un equipo. Cuando entran dos o tres o los que entraran a una urgencia siempre quedan dos apoyos afuera esperando a los que salen, porque salís agotado, más si tenés de dos a tres horas ahí adentro porque ingresó un paciente. Una vez que ingresaste, tenés que hacerle todo al paciente, no podés salir del sector si te queda algo pendiente”.
En cuanto a la parte más difícil, la de un deceso, la coordinadora del nosocomio fue muy clara: “Cuando tenemos un óbito, el paciente se va solo porque cambió la forma de la despedida que se suele hacer, que los familiares, el servicio fúnebre… El paciente sale con el cuerpo preparado según protocolo, se lo traslada al servicio fúnebre y de ahí, directamente lo que corresponde. Dentro del protocolo está permitido que un familiar se acerque a dos metros para reconocer el cuerpo, esa es la máxima cercanía. Es muy duro porque no lo pueden ver ni despedir. Muy duro tanto para los familiares como para nosotros”.
Por último, pese a que se espera que cuando todo esto termine las instalaciones pasen a ser un hospital materno-infantil, mencionó que "la terapia podría seguir funcionando" por su disposición y ubicación.
Y cerró la entrevista con un mensaje concientizador dedicado a la comunidad rodriguense: “Para la población, yo creo que Rodríguez en un punto se portó bastante bien y se viene bancando esto del aislamiento, pero que aguanten un poco más porque podría haber sido peor. Yo entiendo las necesidades de cada uno, pero podría haber sido peor. Ya hemos estado con camas llenas en las terapias y te ponés a pensar y te preguntás qué hacer… Que sigan, que aguanten un poco más aunque sea duro para todos. Que el personal de Salud se va a agotando, cada vez somos menos porque hay mucho personal enfermo, inclusive yo he estado aislada durante cinco días y me dio negativo”.