Flavia Nigreli vive en un domicilio de 2 de Abril al 900 y lleva once años reclamando por un edificio que se construyó en el lote contiguo. Denuncia que viola normativas vigentes de construcción y a raíz de ello sufre distintas situaciones que generan molestia en la vida cotidiana.
Segun la vecina, las molestias comenzaron desde la construcción del edificio en 2009, cuando mientras avanzaba la obra la suciedad que se generaba en los trabajos caía en la terraza de su vivienda. Contó que se ha llegado a desprender un tirante y caído sobre su techo, generando daños en una de las chapas. La mujer reconoció que desde el edificio repararon algun daño pero bastante tiempo después y sólo alguno de todos los que se produjeron.
Nigreli denunció también que el edificio incumple ciertos artículos del Código Civil, dado que tiene ventanas colocadas sobre la pared medianera de la que se sirvió para construirse la propiedad y que le quitaban privacidad si ella quiere estar en su patio trasero. Tras sus múltiples reclamos (llegó a enviarle una carta el ex Intendente, Juan Pablo Anghileri), las ventanas fueron tapadas aunque ella igual manifestó que pareciera ser que lo hicieron "provisoriamente para conformarme".
La otra cuestión es que la terraza del edificio está delimitada por barandas de alrededor de un metro de altura "y debería tener una pared de dos metros que impida la visibilidad" hacia su casa. Desde allí, relató, "ha caído una colchoneta y una toalla que luego han venido a pedirme que devuelva. En las épocas en que las ventanas estaban abiertas, ha caído una asadera una noche".
El último gran problema a raíz del edificio lindero que preocupa a la vecina es el hecho de que desde hace un año arrojan basura a su domicilio. "En mi techo y en mi casa he encontrado hasta droga. Restos de cigarrillos de marihuana, trozos de nylon que cree que pueden tener restos de cocaína. Un objeto que parecía una lapicera y me dijeron que podía ser una 'tuquera'. Yo tengo un bebé que gatea y quiero poder estar tranquila de que si subo a la terraza con él o al patio no va a agarrar cosas como esas en el piso", expresó. "Además, se asoma gente y mis perros ladran y despiertan a mi hijo", agregó sobre las consecuencias de la exposición del interior de su propiedad a la vista de los vecinos, algo que también puede suponer, incluso, un riesgo de seguridad para ella y su bebé.
Por supuesto, Nigreli manifestó haber hecho múltiples reclamos a lo largo del tiempo. Los últimos fueron a la Guardia de Ordenamiento Urbano (GOU), al Juzgado de Faltas N°1. "También he llamado a Ana Mottino este año y ha venido una oficial a la que le conté la situación", dijo. Y agregó que también "le he mandado mensajes a Mauro García". Hasta ahora, no ha habido avances en la situación y su reclamo sigue sin ser resuelto.
Así dejaban su casa durante la construcción del edificio:
Las ventanas abiertas que daban a su casa, en 2013 las taparon tras sus reclamos