El hecho ocurrió en un descampado cercano a la calle Baigorria, entre Delfi de Ortega y Comandante González, el viernes 21 de agosto alrededor de las 11.20 horas.
Andrea, de 40 años, madre de la nena, denunció en la Comisaría Segunda que había llevado a su hija a la casa de sus padres, a una cuadra de su domicilio, para que la cuidaran debido a que ella tenía que irse a trabajar.
Al llegar, se percató de que su madre (y abuela de la menor) debia comprar algo en el almacén para cocinar entonces le pidió a la nena que vaya a hacer ese mandado al almacén ubicado a una cuadra de la vivienda.
Momentos después, la niña volvió corriendo asustada y al preguntarle qué había sucedido, ésta relató que había escuchado la voz de una niña desde el descampado cercano y que pedía ayuda. Luego contó que ella se había acercado y al hacerlo, aparecieron dos sujetos a caballo que la invitaban a acercarse más y, al asustarse, había huído corriendo.
Al preguntarle por más detalles, Andrea denunció que su hija sólo recordó que el caballo era marron pero que no podía recordar los rostros de los individuos. La mujer también mencionó que, por comentarioe en el barrio, estos hombres "suelen frecuentar la zona cometiendo ilícitos".
