Familia de barrio Güemes asustada por un violento episodio con un delincuente en su casa
Fue en una vivienda de la calle Azuay, entre Arturo Williams y Eduardo Madero el sábado 10 de abril en horas de la mañana.
Allí, una mujer de 42 años, alrededor de las 11.30 horas, escuchó ruidos en su patio, ladridos de perro y el grito de su ganso. Al salir a ver que ocurría, vio a un joven al que reconoció como "el hijo de una vecina, con quien mantiene conflictos".
La mujer denunció en la comisaría 2° que el sujeto le gritó y quiso entrar a la casa, pero ella trabó la puerta. Sin embargo logró entrar y se trenzaron en lucha hasta que ella logró empujarlo hacia afuera de la propiedad. Relató que una chica (que cree que sería la novia) logró llevarse al individuo.
Gerónimo, pareja de la víctima, manifestó: "Nosotros vivimos con nuestros hijos de diez y tres años de edad. Yo no estaba en ese momento en la casa. A la media hora el pibe volvió arrojando piedras y ladrillos a la casa, enojado porque acusaba a mi mujer de robarle una planta de marihuana que él había dejado en el patio. Mi mujer a los gritos llamó a los gendarmes que corren en el predio de la base de Gendarmería que está frente a mi casa y ellos tuvieron que venir para tratar de calmar la situación".
Y continuó: "Mi mujer hizo la denuncia en la comisaría y también se presentó otra vecina que había tenido una situación similar esa mañana. El chico este vive a 150 metros de mi casa, ya le robó a todo el barrio. Es el que robó en una casa de esta calle, Azuay, hace unos días. Supimos que la mamá lo denunció en la Comisaría de la Mujer porque también le pegó a ella. Nos terminaron diciendo que al pibe lo agarraron pero desde la fiscalía ordenaron su liberación porque sólo había sido un intento de robo. El pibe nos amenazó de muerte, dijo que iba a volver y prendernos fuego la casa. Estamos con miedo".