Gran consternación por la partida de un empleado municipal de 17 años de trayectoria
Había ingresado a la Comuna hace 17 años y cumplió funciones en distintas áreas. Su último paso lo dio en el Museo Histórico Municipal Dr. Bernardo de Irigoyen, que ya había sufrido un deceso este año de otro integrante.
El Municipio de General Rodríguez tuvo un triste inicio de semana luego de conocerse la partida de "Nery Torres", un histórico empleado de la municipalidad que murió este lunes tras estar internado en la Clínica Centro por un cuadro de neumonía bilateral.
De 54 años, Torres se había sometido a un test Covid-19 para constatar si había contraído el virus, aunque el resultado todavía no había sido establecido, según una fuente municipal que se había contactado con él en los últimos días.
Nery nació el 21 de marzo de 1967 en Asunción, capital de Paraguay. Ingresó al Municipio de Gral. Rodríguez el 1 de julio de 2004 como personal administrativo dependiente de la Secretaría de Gobierno.
Posteriormente, ejerció un cargo en la Inspección General y finalmente recaló al Museo Histórico Municipal Dr. Bernardo de Irigoyen el 10 de febrero de 2009, donde se mantuvo hasta entonces.
Las sentidas pérdidas de compañeros municipales de este año:
Enlaces a cada uno: Rodolfo Vicente - Ricardo Jaime - Guillermo Huber - Mario Coto Díaz y Ricardo Machuca - Daniel Barbeito - Nery Torres.
Comunicado del Museo Municipal:
Desde dicho establecimiento local, dirigido por Mirna Santillán, emitieron este lunes un muy sentido mensaje de despedida a Torres, que reza lo siguiente:
"Y nos tocó bien de cerca, falleció nuestro compañero Nery Torres, y ahí estamos todas y todos consternados de ver tan de cerca la muerte, hoy estuvimos compartiendo el trabajo y al otro día uno de nosotros ya no está. Horas de trabajos, de acciones programadas entre todos, cuidar nuestro espacio, estar atento a las personas que nos visitan, dar la información adecuada, compartir la instancia del mate entre charlas y risas, pensar cuestiones para lograr beneficios como trabajadores municipales, en fin, la vida misma que transcurre diariamente.
Que descanses en paz, que tengas mucha luz; un abrazo fuerte fuerte a su compañera y a sus hijos. Seguí revisando bien todo, abriendo las ventanas, ventilando, repasando los pisos, abriendo el Museo a horario, 'peleando' con Otto, preparando el mate cocido, atendiendo a la gente, prendiendo las luces, poniendo la alarma, comprando los bizcochitos, contando anécdotas, dejando el Museo listo; seguirás siempre tomando unos mates con nosotros".