Tristeza: murió la mujer con graves quemaduras tras un incendio en barrio Güemes
Antonella Tresoldi tenía 77 años y estaba internada en el Hospital Vicente López desde la tarde del último domingo 24 de octubre, cuando sufrió severas quemaduras en el incendio de una casa en barrio Güemes.
Estaba entubada y no había mostrado mejorías en estos días. Sus partes más complicadas habrían sido sus piernas, que presentaban necrosis y las quemaduras habrían comprometido hasta los huesos. También tenía una infección en el pie que no se había podido curar.
El incendio había sido en una vivienda de la calle Encarnación entre Av. Del Libertador y Hudson, donde, según se supo, el fuego habría consumido un ambiente de una vivienda aunque se desconoce como fue que se había iniciado.
Dos personas habían sido atendidas por inhalación de humo y Antonella trasladada al Hospital por las quemaduras sufridas, que serían de tercer grado según fuentes consultadas.
Su cuerpo no resistió y, tristemente, pasadas las 21.30 horas del último miércoles 27 de octubre se supo que terminó falleciendo. Fue velada en la casa funeraria de la calle Int. Manny al 700.
El desgarrador testimonio de la hija de la mujer fallecida en el incendio en Güemes
Gabriela Tresoldi contó que su mamá, Antonella, estaba en silla de ruedas y llevaba más de 20 años combatiendo la enfermedad de Parkinson. Por ese motivo, su familia estaba pendiente de ella.
El día del incendio, la víctima estaba al cuidado de la ex pareja de su hijo, que falleció hace unos años. La mujer salió unos minutos y en ese interín la casa comenzó a arder. Fue imposible sacarla de no ser por la participación de un vecino que, según contó Gabriela, "entró a rescatarla pero ya estaba muy mal". Una ambulancia trasladó a la hija de su cuñada y a ese vecino por inhalación de humo.
Aseguró que los Bomberos tardaron en llegar y que cuando lo hicieron, el fuego ya se había apoderado de la propiedad en la que Antonella vivía hacía unos 15 años.
Gabriela aún no sabe que fue lo que desató el incendio. Remarcó que fue una tragedia porque "mi cuñada la dejaba sola unos minutos, cuando tenía que ir a comprar algo al almacén o algo así. Sino, siempre estaba muy cuidada". Y contó que "mi mamá tenía una habitación donde guardaba todas las cosas de mi hermano fallecido. En ese cuarto usualmente se quemaba la lamparita y quedaba a oscuras. Quizás habrá pasado eso y ella habrá querido prender una vela... Intuyo que quizás se le habrá caído y después ya no pudo salir".
Triste, aseguró que "mi mamá murió de una forma horrorosa. La imagen de cómo la vi nunca jamás en la vida te la sacás de la cabeza. Ella había tenido dos fracturas de cadera, el Parkinson. Ya tenía suficiente, no se merecía morir así, se merecía una muerte en paz".
Y destacó: "Fue una guerrera toda su vida, tuvo una vida difícil de chica, nunca bajó los brazos. Si estoy parada es porque ella me enseñó a ser fuerte. Era una luchadora tenaz. Era la luz de mi vida. La amo y se llevó parte de mi vida con ella, no pude tener mejor mamá".
Por último, dijo que "agradezco a mi marido, Fabián Nicoletti, su mamá Elda, su hermano Claudio, su hermano Luis y su señora Graciela. Todos ellos nos ayudaron muchísimo y nos apoyaron en todo esto que pasó con mi mamá. Estoy muy agradecida".