Sociedad 23 DIC 2021

Wanda Nara vino a General Rodríguez a visitar a Joaquín tras los rumores de haberlo engañado

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Este miércoles 22 de diciembre, la empresaria y esposa del futbolista Mauro Icardi visitó el barrio Parque Rivadavia para ir a la casa de Joaquín Nuñez, el nene pastelero de 10 años que se hizo famoso por su historia de superación.

Tras conmover al país, el chico había cautivado incluso a muchos famosos que se solidarizaron con su causa. Una de ellas fue Wanda Nara que, de regreso en el país, le dijo que le encargaría una torta para el cumpleaños de uno de sus hijos. 

Sin embargo, en el festejo, seguidores del nene preguntaron si la torta la había hecho él y respondió que ella nunca lo contactó. Todos pensaron que lo había ilusionado en vano, pero ante el revuelo generado, ella explicó que tenían programado otro festejo familiar cuando arribara Mauro Icardi a la Argentina y ahí sí habría una torta hecha por Joaquín.

"Por fin llego el miércoles fue hermoso conocerte @joaquinn5084 a vos y a tu familia! Nunca dejes de luchar por tus sueños", escribió Wanda Nara en su cuenta de Twitter y compartió varias fotos con el pastelerito rodriguense.

La historia del nene pastelero

En 2019, Joaquín le arrojó alcohol a las brasas encendidas de una parrilla y terminó con el 25% de su cuerpo quemado. Estuvo un mes internado en terapia intensiva del Instituto del Quemado y se recuperó, pero tuvo que hacer un largo tratamiento en el que le colocaban injertos para sustituir partes muertas de su piel. La rehabilitación se suspendió por la pandemia y las heridas cicatrizaron, impidiendo colocarle más injertos, por lo que los médicos le dijeron a la familia que la solición era colocarle cuatro expansores bajo la piel de su rostro para hacerle una cirugía reconstructiva.

Mientras tanto, el nene venía incursionando en la pastelería: comenzó haciendo bizcochuelos y luego hacía tortas más complejas y muffins, con decoraciones. Su pasión es inédita en su familia, porque su mamá Raquel reconoció que "yo nunca hice cosas dulces ni mi mamá. Mi marido cocina pero nada de tortas y mi papá solo hacía pan casero. Es algo que a él siempre le gustó desde chico pero no heredó esto de nadie. Creíamos que con lo que le pasó iba a dejar pero fue todo lo contrario. Hay cosas que las ve en videos y las quiere hacer, y otras recetas que es las imagina. En casa nadie cocina bizcochuelos tan altos y esponjosos como él. Además, el decorado que hace es increíble".

Primero, sus creaciones las disfrutaban su familia, en ocasiones las reparte a merenderos y familias humildes, pero también las convirtió en un emprendimiento del que recaudaba fondos para esa cirugía que hoy está a punto de convertirse en una realidad. Ahora persigue otro sueño: abrir su propio local en una edificación a medio construir que le dejó su tío. 

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FERRETERÍA ROVI