El drama de la familia del joven salvajemente golpeado en Bicentenario: "Nos arruinaron la vida"

El joven que logró recompenerse de un contundente golpe en la cabeza, deberá afrontar el mayor desafío venidero junto a sus seres queridos. 

La vida de Franco Benavídez y su familia cambió por completo luego del lunes 20 de diciembre. Desde ese día, en el que fue golpeado salvajemente por un grupo de alrededor de 15 personas en la entrada del barrio Bicentenario, se encuentra internado y en observación permanente, aunque en los próximos días podrían derivarlo a una internación domiciliaria.

Así lo comentó Patricia, su madre, a La Posta Noticias. De todas formas, la situación no es para nada sencilla. "Yo siempre me arreglé sola, tanto de mi casa como de mis hijos y de mi problema. Soy el sostén de la casa, de mis hijos, así que esto me perjudicó completamente", remarcó la mujer.

En este sentido, recordó que "cuando pasó todo esto, tenía que llevar a mi nene de 14 años a dos estudios de su cabeza porque él nació con un problema neurológico por lo cual quedó ciego de un ojo. Desde que nació estoy luchándola y ahora se me sumó esto", enfatizó.

En cuanto al estado de salud de Franco, pese a que en las últimas semanas se registraron algunas mejoras, la realidad es que "perdió su memoria y hay cosas que se acuerda y otras que no". "Con el correr del tiempo y la rehabilitación vamos a ver qué va pasando", agregó Patricia.

"Ahora le subieron la medicación, le están dando clonazepam porque no dormía. Su sistema nervioso no quedó bien y por eso le van a dar la internación domiciliaria", continuó la madre, que ya anticipó que tras ello, va a haber que prepararlo para la operación. Semanas atrás, se conoció que Franco va a necesitar una prótesis en la cabeza que "está arriba de los $2 millones", había precisado la madre del joven de 20 años.

No obstante, "eso es otro dolor de cabeza porque justo en junio se le termina la obra social del papá", planteó Patricia, que ya está pensando en "luchar por un recurso de amparo para que siga teniendo esa misma obra social".

En tanto, el tema alojamiento se presentará como una nueva preocupación para la familia. "La casa donde alquilo es muy pequeña y voy a tener que buscar para mudarme, pero yo estoy trabajando en negro y va a ser muy difícil conseguir algo por inmobiliaria sin recibo de sueldo", expresó la mujer. 

"Ojalá que encuentre una solución pronto Con todo esto, nos arruinaron la vida", dijo Patricia, al tiempo que, pese a todo lo detallado anteriormente, valoró que "teniéndolo en el domicilio se va a poder manejar de otra manera, organizar una marcha y hacer ruido".

En lo que respecta a la causa que investiga el hecho sucedido el 20 de diciembre y que ya tiene un detenido , la madre de familia se quejó: "No puedo creer que la Justicia todavía no avance".