Murió el joven atropellado por un colectivo de La Perlita: quién era y cómo sigue la causa
En las primeras horas de este jueves 12 de mayo se pudo confirmar el fallecimiento de Raúl César Bartolomeo, el joven de 22 años que había sido atropellado cuando circulaba en bicicleta por un colectivo de La Perlita en cercanías del Polo Industrial en la noche del miércoles 11.
El hecho se produjo a metros del predio, en la zona de calle Corrientes y Ruta 24, alrededor de las 20 hs. El ómnibus correspondía al recorrido 1 (interno 702) y era conducido por un chofer de nombre Gustavo Armando Restitucci, de 60 años, que resultó ileso. Sin embargo, el impacto dejó grave al ciclista, que debió ser trasladado por una ambulancia del SAME al Hospital, donde fue internado de urgencia.
De acuerdo a lo que pudo saberse desde el entorno de Raúl, el chico volvía de trabajar en un country de la zona como albañil y su familia, al ver que no regresaba, salió a buscarlo y fue allí cuando se anotició del choque. "Entró al hospital con varias fracturas, ruptura de vasos sanguíneos y un traumatismo severo de cráneo", comentaron. Lo operaron de urgencia pero murió en la madrugada de este jueves 12.
Raúl no tenía hijos, vivía con sus padres y "el único vicio que tenía es que a veces se fumaba un cigarrillo, era sano y trabajador". Su cuerpo aún no fue entregado a su familia, dado que indicaron que este viernes se le practicará una autopsia. "Está interviniendo la DDI de Mercedes en el caso. Al chofer lo imputaron por homicidio culposo", manifestó un familiar.
Lo cierto es que ahora habrá que esclarecer el trágico siniestro vial. Desde el entorno de la víctima comentaron que aparecieron "dos o tres testigos" aunque habría más que podrían estar en condiciones de declarar. Las versiones de quienes presenciaron el hecho mencionaban que el colectivo habría impactado a gran velocidad al ciclista en una zona donde se detienen a dejar pasajeros, pero como no paró, quizás iba más rápido. El cuerpo de la víctima quedó a muchos metros del punto del impacto, sobre la calzada, con múltiples lesiones. El jueves por la tarde, en el mismo punto y antes de llegar a la hora del choque, se notaba que la visibilidad era muy baja. Las luces LED de la entrada del Polo están todas sin funcionar.
Es de destacar la falta de iluminación en la zona, así como también de señalización del pavimento de ningún tipo, factores influyentes en episodios luctuosos de este tipo por la afluencia de vehículos que circulan por la zona, donde se encuentran los parques industriales y en la que, ante este panorama, circular en bicicleta es un verdadero peligro.