Irma, la ex pareja de Guillermo Jara, el camionero asesinado apedreado el querer esquivar un piquete en Daireaux, habló sobre el crimen y pidió justicia.
Irma, quien fue la mujer del rodriguense y es la madre de la familia que formó, brindó unas palabras al canal C5N, durante un programa conducido por la peridosita Luciana Rubinska, en las que se dejó entrever el dolor y el pedido urgente de justicia por lo sucedido.
En primer lugar, recordó cómo recibió la noticia. "Fui una de las primeras, alrededor de las 5.30hs, un amigo de él me avisó y me encargué de avisarle a la familia. El primer momento ya sabíamos que lo habían apredreado pero tenían que ver si era por eso, él hace años que viaja, es muy difícil que haya perdido el control por nada o se haya ido a la banquina. No se, no se entiende", señaló.
Para describirlo tal y como era, expresó que "era buenisimo como padre y nosotros estabamos separados hacía dos años pero como padre siempre presente, no se puede creer. Toda la vida fue camionero, desde que lo conozco ya manejaba, tenía 13 años. Ya sabía que manejaba tractores, era su locura y pasión. Él siempre dijo que su vida se iría en el camión pero no tan pronto y de esta manera".
Sobre los reclamos en la ruta, aseguró que Guillermo acompaña el fin de la manifestación pero no las prácticas. "Estaba cansado, sólo hablamos el domingo, pero estaba cansado de todo lo que pasaba, muchas horas parado y quería llegar. Después se le complicaba sino y estaba muchos días parado, no estaba de acuerdo con las protestas. Sí entendía por la falta de gasoil porque buscaba cuando venía para acá, iba con su hijo, estaba cansado con todo", fue su explicación. Y agregó: "Tuvo otros problemas esta semana para pasar pero fueron cortos y enseguida lo dejaron pasar. En la última que me contó fue así, que discutió pero que luego lo dejaron pasar".
La noticia fue impactante y en el correr de las horas se dilucidaron detalles que se hacen difíciles de entender. "No podía creerlo porque es difícil darle la noticia a un hijo, él no me creía. Hasta que vino su hermana y le dijo que era cierto, no lo creía. Lo único que pedimos es justicia, que se pague porque no puede ser que lo hayan perseguido ocho kilómetros, él ya había pasado. Lo tenían que haberlo dejado ir, propios compañeros lo decían. Lo siguieron, está confirmado por el rastreo satelital. Por lo que me llegó a mi eran tres vehículos, dos se volvieron y uno fue el que siguió, una camioneta, la que lo sobrepasa y empieza a tirar piedras", sostuvo la mujer.
Por último, con la misma angustia que la acompañó en toda la charla, Irma sostuvo que "él se conocía la ruta como la palma de su mano, era su vida. El camión era su vida. Lo mataron, por más que digan que él volcó, siempre fue precavido con esas cosas, a él lo mataron. Salía desde acá, de General Rodríguez cargado y se iba a diferentes lugares. Le tocaba Río Negro como también Neuquén, Cipoletti era uno de los destinos, había un lugar donde se iba a encontrar con compañeros y continuar su camino. Pido justicia y que no salgan más si es posible. Tanta maldad no se puede creer"
