Por segunda vez en el año la imagen del “Negrito Manuel” fue intervenida, la misma se encuentra ubicada al kilómetro 59 de la Ruta 7.
La ermita cristiana del Barrio Granaderos no es la primera vez que sufre actos vandálicos. Durante los últimos días de enero del corriente año, la estatuilla del “Negrito Manuel” ubicada al kilómetro 59 de la Ruta 7 fue parcialmente destruida. Actualmente, el hecho volvió a ocurrir de manera violenta y sus fieles continúan buscando respuestas de seguridad.
Vecinos y vecinas comentaron que las autoridades municipales ya estaban al tanto del tema y que la respuesta dada fue que ya se encontraban trabajando desde Obras Públicas para brindar un poco más de protección al lugar.
A pesar de esto, los resientes esperaban más presencia policial en la zona y vigilancia de las cámaras de seguridad, ya que los vándalos no pudieron ser identificados.
En el lugar se encontró la figura de la Virgen de la Rosa Mística decapitada, la caja de vidrio, que resguardaba la imagen del “Negrito Manuel”, tirada y destrozada al costado del espacio de culto y sus ofrendas rotas.
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En julio del año pasado, ya había sucedido un episodio similar, lo que hizo que frente a la acumulación de hechos, un grupo de vecinos envié notas al Municipio y eleve un reclamo al Honorable Concejo Deliberante. Como solución, se instaló una cámara de seguridad, pero la misma no captó ninguna imagen que colabore para encontrar culpables.
El “Negro Manuel” fue un esclavo africano, quien en 1630 viajó desde Brasil a Buenos Aires para traer dos imágenes de la Virgen María. Las mismas tenían como destino, lo que hoy es el norte argentino. Pero debido al peso del equipaje, la carreta se estancó a orillas del Río Luján, lo que obligó a dejar una caja de la Virgen para continuar con la misión. El responsable de cuidarla fue Manuel, el cual se sintió en deber de servirle devotamente y atraer peregrinos hasta su muerte.
