Qué dijeron y resolvieron desde el Municipio sobre la iglesia que tiró pirotecnia en las fiestas patronales
Fue confirmado por el funcionario de la Secretaría de Control Urbano, Ezequiel Drago, en declaraciones a la Radio Municipal.
Luego del controvertido cierre que tuvieron las fiestas patronales, con quejas y malestar por parte de los vecinos y hasta políticos que se acercaron al lugar, desde el Municipio se multó a la institución religiosa por no cumplir con la ordenanza vigente que prohibe el uso de pirotecnia en el distrito.
Drago señaló que "decidimos labrar un acta de comprobación y hacer la multa correspondiente. Hubo al menos dos oportunidades en las que se tiraron fuegos artificiales. No fue solo al final, si sobre el cierre de la procesión pero hubo un lanzamiento de fuegos artificiales, nos acercamos a pedirles que no lo hagan más, les explicamos el motivo que es porque tenemos una ordenanza vigente que no se pueden utilizar pirotecnias".
En este sentido, agregó que "se les hizo esa apreciación, nos fuimos y volvieron a tirar. La pirotecnia que les quedaba la tiraron. Entonces se labró el acta de comprobación que es una multa porque una vez avisamos pero ya la segunda nos pareció una tomada de pelo. Se hizo en el mismo momento y responde a esta situación". Y cerró: "Entendimos en un primer momento que es una fiesta popular, con la cuestión de la virgen y dijimos que no tiren más. La segunda vez ya no era necesario".
La situación ocurrida el sábado 16 por la noche generó polémica y fastidio en los presentes porque estaba programado un cierre con pirotecnia, que se suponía, iba a ser lumínica pero esto no pasó y se alteraron los ánimos de funcionarios y de la gente que vivía un clima festivo.
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Cabe recordar que al día siguiente trascendió que en el lugar había estado presente el coordinador de secretarías Luciano N. Remo Larralde, quien trató de lidiar con la situación discutiendo mientras ya se habían prendido las mechas, lo cual generó su enojo. Ante los estruendos repetidos provocó el reproche a los organizadores.
Tras su acción, varias de las personas que asistieron le devolvieron esa "gentileza" al funcionario municipal en un clima hostil que derivó en el retiro del lugar de Larralde.
