Prestadores y familiares de personas con discapacidad se manifestaron en la Plaza por la crisis

Desde comienzos de esta semana, se instaló la polémica por el atraso en los pagos de las obras sociales a los profesionales que trabajan en el área de discapacidad y varios servicios dejaron de funcionar. Como consecuencia muchas familias se encuentran desesperadas por las terapias que son fundamentales en las vidas de estas personas.

La falta de pagos a los trabajadores en el sector ocasiona un verdadero caos en la rutina de jóvenes y adultos que sufren alguna discapacidad ya sea para asistir a sus colegios, trasladarse o ir a los centros de día. Sea por recortes en el presupuesto o por demoras de los prestadores, los platos rotos siempre lo pagan la gente. 

Desde el Gobierno Nacional, específicamente la Agencia de Discapacidad, a cargo de Fernando Galarraga, aclaró que hubo atrasos en los pagos pero que la Superintenencia de Seguros de Salud (SSS) ya habría comenzado a normalizarlos. Lo cierto es que dicha información dista con la realidad que ya lleva varios días sin servicio y no asoma en el horizonte un cambio rotundo. Cabe destacar que los trabajadores ya vivien acostumbrados a facturar su trabajo y contar con una demora de tres meses, seis, o hasta un año de tiempo para cobrarlo. Esto sin tener en cuenta la inflación que se maneja en Argentina.

Mientras tanto, en General Rodríguez como en tantos otros distritos, varios profesionales acompañados de familiares y jóvenes con discapacidad marcharon este martes 30 de agosto a las 15.30hs a la plaza frente a la Municipalidad para hacer oír su reclamo y evitar que sigan vulnerándose derechos.

En diálogo con La Posta Noticias, Ana María, madre de un chico con discapacidad y organizadora del grupo Uniendo Historias, señaló que "esto nos afecta terriblemente. A los prestadores porque no cobran y a nosotros porque nuestros hijos no pueden seguir con sus terapias, ir a las escuelas, no tienen transporte. Esto se cortó por un paro de tres días pero hay muchos que no piensan volver porque las obras sociales no les están pagando".

En este sentido agregó que "la Superintendencia de Salud no está mandando el dinero a las obras sociales y no se está pagando. Nadie puede vivir sin cobrar un sueldo y nuestros chicos no pueden estar sin terapia. El avance de nuestros hijos dependen de eso, de tener un traslado. No todos pueden viajar en colectivos y si las obras sociales nos dejan no sé cómo podemos seguir. Tengo una angustia que me la paso llorando. Lo único que contiene a los adolescentes son los centros de día y ya no están funcionando. Hay chicos angustiadisimos porque no tienen escuela"

Por último, con todo el contexto que se vive opinó que "evidentemente esto es recorte. Las obras sociales como hacen siempre tardan en pagar, meses y meses en autorizar. Todo es un gran combo de abandono de las personas con discapacidad. Nosotros como padres tenemos que apoyarlos porque nos afecta directamente. Ellos no cobran y nosotros no tenemos servicio. Es imprescindible para alguien con discapacidad tener su terapia y no lo tenemos. A todos les deben".

Por su parte, Carolina Molto, directora del Centro de Día Pequén, aseguró que "trabajamos con jóvenes y adultos con discapacidad intelectual. Tenemos 30 personas que es el cupo máximo y también el servicio de apoyo a la inclusión educativa con 75 alumnos en escuelas de la zona. La situación normal de los prestadores en discapacidad es que la prestación de junio deberíamos haberla cobrado en agosto, es el circuito normal de Nación, son los plazos que estamos acostumbrados a sostener y a solventar en las instituciones y cada persona".

Preocupada por todo lo que ocurre, Molto expresó que "en agosto tendríamos que haber recibido los pagos de las facturas de junio en los mejores casos porque tenemos deudas desde enero, febrero y hasta el año pasado de algunas obras sociales y tampoco lo recibimos. En el mes de agosto no recibimos de ninguna obra social los pagos. Ante la pregunta la respuesta de la obra social es que la Superintendencia de la Salud autorizó la salida de dinero pero que la AFIP la tiene retenida y no dan fechas de pago. Todo lo que es sueldos como impuestos en una institución los tenemos que mantener igual. Estamos acostumbrados a acarrear estos 60 o 90 días que es lo "normal", pero esto ya es insostenible y más sin tener una fecha de pago".

Sin embargo, los profesionales destacaron la adhesión de las familias. "Por suerte la situación fue bien recibida por las familias y tenemos este apoyo porque no podemos sostener más esta situación. Lo que se vulnera son los derechos de las personas con discapacidad. Ver a nuestros alumnos haciendo esto es totalmente injusto", aclaró.

Quien también habló con nuestro medio fue Gabriela Brugue, psicóloga en Pequén, quien describió cómo es el trabajo mes a mes. "Los honorarios que se estipulan vienen con retraso de aumentos que lejos están de la inflación real que hay sumada a esta situación de que cobramos lo que ellos consideran que es muy bajo más los 90 días de retraso, con suerte. Una persona que empieza a trabajar espera con suerte entre tres y seis meses para empezar a cobrar. Además los gastos que vas teniendo. Hay que ahorrar previamente para "invertir". Normalizamos cosas que no van pero ya sabemos cómo es la forma de trabajar y hay una vocación claramente", indicó.

Hasta el momento, ninguna autoridad nacional ni provincial contactó a estos lugares para dar tranquilidad en la situación. "Nadie se contactó y en nuestro caso hemos llamado a la Superintendencia de Salud quien nos debería dar una respuesta porque las obras sociales dicen que la traba está ahí y no nos atienden", explicó Carolina Molto.

Para cerrar, Ana María sostuvo que "se convocó al Área de Discapacidad del Municipio, también al intendente y no vinieron. Ojalá nos apoye, esto no es culpa del Municipio pero tener la representación sería importante". Se estima que alrededor de 200 familias son por las que se manifestaron este martes.

Al terminar la marcha de comunicaron desde la dirección de Discapacidad del Municipio y brindaron por un mensaje su acompañamiento y respaldo en el reclamo.