Vecinos héroes: salvaron la vida a un perrito atrapado por días en una cañería en la puerta de una escuela

Sin embargo, tuvieron que hacerse cargo de la reparación de la vereda y costear los gastos veterinarios, porque no tuvieron consideración escolar ni municipal.

La situación despertó orgullo por el accionar de las personas que se involucraron y al mismo tiempo indignación por la respuesta que tuvieron de las autoridades del colegio. También hubo críticas hacia Zoonosis. Este lunes 26 de septiembre, vecinos del barrio Figueroa Alcorta lograron salvarle la vida a un perrito de unos ocho meses aproximadamente que pasó casi una semana atorado en una cañería de desagüe ubicada frente a la Escuela Primaria N° 5 "Manuel Estrada". 

A pesar de los reclamos constantes de padres y alumnos del establecimiento, la respuesta que dicen que les dio la directora del lugar habría sido "que iba a salir sola" y que "no podían romper la vereda frente a la escuela". Sin embargo, los días pasaron y tampoco fue de ayuda la visita de Zoonosis, sobre el cual los vecinos lamentaron cómo se manejó porque su única intervención habría sido ir y mencionar que no podían hacer nada y que se terminaba el horario de trabajo.

Yanila, una de las salvadoras del animal, señaló en exclusiva a La Posta Noticias que "nos llegó al grupo de Whatsapp del barrio que había un perrito que estaba atorado hace varios días por el agujero de los caños de desagüe. Nos encontramos con que estuvo más de seis días sin comer, sin tomar agua. Seis días encerrado en un caño. Lo hablamos con gente de la escuela y la directora dijo que iba a salir sola, que era una perrita que estaba embarazada y que cuando tuviera iba a poder salir sola por sus propios medios. Escuchábamos el llanto desesperado, queríamos saber por dónde lo podíamos sacar. La directora negó rotundamente que rompiéramos el piso, que la perra iba a salir sola. Le dijimos que lo íbamos a romper igual, dijimos que íbamos a hacernos cargo en repararlo y en vallar todo y ahí dijo que sí".

Otro vecino, el responsable de hacerse cargo de reparar la vereda y pareja de Yanila, agregó que "la escuela nos dijo que no podíamos romper y hasta que yo le dije que me hacía cargo de reparar la vereda mañana (por este martes) ahí me dieron el sí. Era imposible sacar al animal si no, sacamos tierra de la cuneta, estaba atorado, era imposible llegar, había 2 metros y medio hasta el caño".

"Se llamó a Zoonosis, vino dos días antes, quisieron llamarlo con comida y se fueron diciendo que iba a salir solo. Gente que trabaja para la política llamó a la directora de Zoonosis y ellos dijeron que trabajaban hasta las 2 de la tarde. Pasó ayer a las 5 de la tarde mientras todos los chicos escuchaban como lloraba el perro. Pasó la semana pasada, el fin de semana, frío, hambre. Cuando empezamos a romper y a picar con ayuda de los bomberos, vemos que el perro era macho, tamaño grande. Y si creíamos que era hembra se quedaba adentro y moría", expresó con angustia Yanila.

En este sentido, su pareja indicó que "pequé de inocente porque dejé mi número esperando que desde la escuela me pregunten si pudimos sacar el animal, si estábamos arreglando. Hasta el momento nada, demuestra la poca importancia que le dan. Sabemos que por el animal no pensaban hacer nada, pero si el hueco queda los chicos mañana ingresan al colegio y es otro riesgo. No se preocupan por nada".

En relación a cómo se resolvió todo, Yanila continuó: "llamamos a una ONG (SOS Can) que trabaja con animales y nos dijeron que ya venían. Vinieron, se ocuparon de llevarlo a un veterinario por cuenta de su bolsillo. No fuimos al Hospital Municipal porque por la tarde está cerrado. Una vecina lo adoptó, reconoció que era de un hombre que no le daba de comer y ahora lo está cuidando".

Por suerte, el perro estaría en plena recuperación aunque todavía no puede caminar. Poco a poco comenzó a mover sus patitas y se le harán estudios para ver cómo continúa. No se descarta que haya denuncias para la dirección de la escuela y para el ex dueño del canino, acusado de no darle de comer y culpable de que estuviera en esta situación.

Por último, Yanila dejó una reflexión final: "A los directivos de la escuela les pido que traten de hacerse más presentes y preocuparse por dar un buen ejemplo a los niños. Hay un directivo que no toma cartas en el asunto, no tuvimos ni el apoyo ni la ayuda necesaria. Estamos a pulmón poniendo lo nuestro para arreglar una escuela pública. Tendrían que estar ellos haciéndolo. Somos pocos los que tenemos corazón y nos importa la vida de un animal. El edificio que inauguraron es hermoso pero no está funcionando (jornada completa), no tiene número de teléfono y no pudimos comunicarnos. Sabían de la situación del perro, lo dejaron morir, total nadie lo ve", dijeron ofuscados.

EDITORIAL: Replanteo a autoridades y necesidad de reparo a los vecinos comprometidos

La cuestión no pudo tener peor timing, a apenas días de la inauguración del hospital pensado para asistencia de mascotas y tras largos discursos respecto de los derechos de los animales, esta situación obliga a repensar algunas cuestiones que en la práctica hay que atender mejor, para que lo que se dice en un atril, tenga correlato con la realidad.

Afortunadamente un grupo de vecinos, los bomberos y una ONG se encargaron de todo y salvaron a un cachorro que vivió seis jornadas debajo de la explanada donde cientos de chicos van a educarse y lo oían llorar allí atrapado. Los nenes van a la escuela, entre otras cosas, para aprender a respetar los derechos de los demás, incluso animales. Derechos que evidentemente a muchos adultos, aún les cuesta. ¿De qué sirve una jornada de perfeccionamiento docente si no se educa en humanidad?

Un tema que deberá replantear la dirección de la Escuela N°5, las autoridades municipales respecto al trabajo "fuera de horario" y la comunidad. En un primer paso, al menos devolverle a esta gente los gastos en los que incurrieron por hacer lo que el Estado había prometido hacer, hace apenas una semana, en discurso de la boca de las principales autoridades del distrito y la provincia. Es genial el edificio, por el plantel de empleados y por la proyección de futuro, pero hace falta mucho más empatía como la de estos vecinos, si se quiere sostener el postulado de los derechos de los animales.

Y esto no significa que no haya esfuerzos y muy valiosos en este sentido, esto no debe ni por asomo mermar el aprecio por lo que se hace bien. Pero sí, es un replanteo necesario para seguir adelante y corregir.

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