Sorpresivo cierre de una industria que llevaba muchos años en General Rodríguez
Se trata de la empresa Tempo, fabricante de muebles, especialmente de oficina, que cierra sus puertas en el distrito luego de haberse instalado hace más de una década y de tener más de 90 años de existencia. Hubo tensión con los empleados pero llegaron a un arreglo por las indemnizaciones.
La triste noticia se conoció el jueves 1 de diciembre cuando los 40 empleados que tenía la fábrica llegaron al predio y se encontraron con que las puertas estaban cerradas. Desde la compañía adujeron cuestiones de salud que se habían sumado a que tras la pandemia hubo un estancamiento que complicó la economía de la organización.
Tempo se había instalado en General Rodríguez en el año 2010 pero tenía más de 90 como empresa. Fueron cuatro generaciones de la familia Solano que hicieron crecer las instalaciones y las ganancias hasta que en el último tiempo las cosas no salieron como lo esperaban. Apuntaron, en parte, a empresas más pequeñas que son difíciles de competir por el hecho de que tienen menos costos fijos cada mes. Igualmente, varios trabajadores señalaron a los encargados de la compañía de malas decisiones comerciales.
El arreglo de cierre se hizo de manera pacífica, todos llegaron a lograr un acuerdo por el pago de sus indemnizaciones. Intervino la Secretaría de Producción del Municipio como asesoría y también estuvo presente el Sindicato de la madera que representó a los trabajadores.
Algunos de ellos conversaron con La Posta Noticias tras enterarse de la noticia. "Estamos quedando sin empleo, cerró la empresa. Hoy vinimos como de costumbre a las 7 de la mañana y nos encontramos con que estaba cerrada. Esta fue una empresa líder en sus buenos años. Yo hace 43 años que estoy acá, he crecido y envejecido en la empresa. Fueron buenos patrones, ya fallecieron los dueños, quedó la cuarta generación", expresó Manuel en primera instancia.
Y agregó: "Teníamos relación directa con los dueños anteriores, fueron muy buenos y se fueron de este mundo. Quedaron estos, que no saben manejar nada. Es una mina de oro, pero hay que saber explotarla. Se compraban pocos insumos pero no porque no había ventas. El tema es que un pariente de ellos puso el mismo rubro de lo que hacemos nosotros en Don Bosco donde yo trabajé 40 años. Invirtieron en tecnología y agarraron todos los clientes buenos que tenía Tempo, allá los tomó Industrias Solano y por eso el achique acá".
"Uno veía que podía pasar, pero no tan de repente como hoy. Vinimos y estaba la cortina baja y acá estamos. Es un mal manejo de la empresa, estoy convencido", indicó Manuel.
Por último, Pablo sostuvo que "pensamos que General Rodríguez podía ser un nuevo norte. Era una empresa que facturaba mucho, había empleo, había movimiento de mercadería y se pensaba venir a vivir acá. Esa expectativa duró uno o dos años, entre 2017 y 2019, hasta antes de la pandemia".
En un momento corrió riesgo la negociación porque los dueños querían que el empleado de más cantidad de años trabajará los meses que faltaban para su jubilación, para no pagar esa indemnización, pero al final se resolvió y el empleado fue aplaudido por sus compañeros a raíz de que negoció un valor más intermedio para que no se pierda el acuerdo previo, que contenía a todos sus compañeros.
Aún no se sabe qué pasará con la empresa en cuanto a la propiedad que posee en el Sector Industrial Planificado, tampoco respecto a la maquinaria ni la cantidad de producción que tenía avanzada allí.
Entrevista y fotos de la última jornada de la empresa: