En qué quedó el proyecto que buscaba eliminar la repitencia en las escuelas bonaerenses
El Consejo General de Educación bonaerense se reunió este jueves 9 de febrero para buscar la aprobación de una reforma educativa que pretendía eliminar la repitencia en las escuelas secundarias y promover que los estudiantes permanezcan en la escuela, incluso ante un mal desempeño.
El Consejo General de Educación de la provincia de Buenos Aires trató hoy una iniciativa para bajar el índice de repitencia a partir del agrupamiento de materias por áreas que comenzó a utilizarse como medida de emergencia cuando las clases volvieron a la presencialidad en la pospandemia.
En las últimas horas y tras la polémica que generó la noticia del cambio en el nivel educativo secundario, se supo que, el Consejo General integrado por tres representantes del Frente de Todos, tres de Juntos por el Cambio y cuatro representantes gremiales, tomó la decisión de postergar el proyecto hasta el 2024 y revisar todas las alternativas posibles para efectuarlo gradualmente y sin complicaciones para los estudiantes.
La resolución planteaba un cambio en el modo en que los alumnos pasaban de año, a partir de denominados agrupamientos de materias que les permitiría avanzar en sus estudios aún adeudando varias materias de años anteriores. La disposición, si se aprobaba, entraría en vigencia a partir del 1º de marzo de este año, pero se pospuso.
En el documento, aparecen un sinfín de escenarios posibles dentro de cada agrupamiento de materías que engloba a las ciencias. Por ejemplo, en Ciencias Sociales se agruparían materias como Historia y Geografía, y así con otras. El alumno podría tener desaprobadas hasta dos materias, pero con una tercera materia pendiente, se establecería el recursado obligatorio solo de esa asignatura del año anterior.
En el mismo, no se mencionan las palabras “repitencia” o “repetir”, sí el “recursado del año completo”, siendo solo un caso extremo para aquellos alumnos que tengan trayectoria en proceso en todas las materias después de pasar por el período de intensificación de saberes durante febrero o marzo.
Cabe recordar, que uno de los cambios introducidos de emergencia durante la pandemia y mantenidos en la actualidad, fueron las Trayectorias Educativas (RITE) que determinan si una materia está aprobada o no durante el cuatrimestre.
Trayectorias educativas en escuelas Secundarias:
- Trayectoria Educativa Avanzada (TEA): categoría perteneciente a estudiantes que alcanzaron los aprendizajes correspondientes en una materia.
- Trayectoria Educativa en Proceso (TEP): categoría perteneciente a estudiantes que no alcanzaron los aprendizajes correspondientes, pero que mantienen una buena vinculación pedagógica.
- Trayectoria Educativa Discontinua (TED): categoría perteneciente a estudiantes que no alcanzaron los aprendizajes ni estuvieron vinculados a la escuela.
Cómo atenderían los casos extremos en las escuelas secundarias
La resolución cuyo tratamiento el Consejo General de Educación postergó hasta el 2024, creaba un “Equipo de Acompañamiento de las Trayectorias Educativas”, conformado por los directivos de la escuela, integrantes del área de orientación, un preceptor cada seis secciones (cursos), un profesor cada seis secciones y los docentes “coordinadores de trayectorias” que la institución tenga designados.
También la iniciativa disponía un equipo por turno para atender los casos de los alumnos más comprometidos, y tomar decisiones sobre la continuidad de las trayectorias de los estudiantes que adeudan más materias.
Entre sus funciones, estaba previsto brindar acompañamiento de forma personalizada, diseñar alternativas de refuerzo de aprendizaje y establecer métodos para ampliar el horario escolar ya sea durante el cursado, post cursado o los sábados.
Qué dijo Alberto Sileoni, director general de Cultura y Educación bonaerense
Este jueves, el funcionario defendió la iniciativa y aclaró que pulirán la propuesta. "Vamos a seguir trabajando esta idea. Tenemos tiempo para discutirlo porque no la íbamos a implementar este año. Vamos escuela por escuela, hablamos con los docentes, con los estudiantes, hablamos con las familias y nos sugieren que a la secundaria hay que darle un vuelco, cambiarla. Conocemos una secuencia dolorosa: repetís una vez, te vestís de héroe y volvés; repetís la segunda vez, dejás la escuela", dijo.
Y apuntó contra la oposición: "Tomamos un camino, claro que puede ser discutible. Nos están discutiendo aquellos que gobernaron entre 2016 y 2019 y no tomaron ningún camino. En 2016 la secundaria ya era un nivel educativo al que había ponerle energía para modificarlo".
Las críticas al proyecto
Por otro lado, expertos en educación, opinaron sobre el proyecto, y como afectaría una decisión tan importante en poco tiempo y con un sistema que aún no quedaba del todo claro.
“El problema no son los cambios, el problema es que todos los cambios están basados en que los chicos sigan adelante sin modificar el esquema pedagógico. Está claro que la repitencia no sirve, pero forma parte de un modelo escolar. Si no se cambia esto último, modificar solo el sistema de promoción es inútil”, enfatizó Guillermina Tiramonti, investigadora de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO)
“Se elimina prácticamente la repitencia. Un alumno puede llegar a tercer año sin haber aprobado matemática en primer y segundo año. Es decir, van a convivir en el aula alumnos con diferentes trayectorias académicas en un mismo curso y la resolución no especifica cómo lo harán”, indicó Sergio Siciliano, diputado provincial de Juntos por el Cambio, y especialista en gestión y planeamiento de la educación.
“Hay que revisar el contenido de las materias y también de otras formas de organización escolar vinculadas a los métodos, los tiempos, la formación de docentes y los diferentes modos de organizar la enseñanza. Eso no está contemplado. Por eso mejorar la escuela secundaria es difícil, no se hace con medidas sueltas”, indicó Claudia Romero, doctora en educación, profesora e investigadora de la Universidad Torcuato Di Tella.
Por otro lado, Tiramonti, coincidió en que la escuela media necesita cambiar, pero que las reformas deben ser de los contenidos: “se sigue enseñando temas del siglo pasado y los actuales están ausentes. Hay que incorporar los nuevos saberes, como matemáticas diferentes y programación”.
Tanto Romero como Tiramonti expresaron que la medida carece de claridad. “Es difícil de aplicar. No se entiende cómo los alumnos van a cursar los aprendizajes adeudados dado que no hay modificaciones en el tiempo escolar ni en la dedicación docente”, dijo la investigadora de Flacso.
“La resolución es innecesariamente extensa y abunda en todo tipo de derivaciones teóricas e ideológicas. Resulta un instrumento bastante poco claro y práctico para que las 4000 escuelas de la provincia puedan implementar cambios durante este ciclo lectivo. Las políticas de cambio no se imponen, se construyen con mucho acuerdo y claridad tanto para docentes, como para padres y alumnos”, agregó Romero.
“Con la reforma podríamos dejar de tener repitencia, pero no deserción. Los alumnos dejan de ir a la escuela porque saben que no les sirve, porque se aburren y porque tienen en claro que hay formas más amigables de acceder al conocimiento a través de internet”, analizó Tiramonti.
“Las políticas de evaluación y acreditación de la escuela secundaria deben cambiar, la repitencia misma suele ser una medida poco eficaz y traumática para muchos alumnos, pero hay que hacerlo al mismo tiempo que se cambian otros aspectos de la escuela. Es probable que esta medida sirva, si logran que las escuelas la implementen, para mejorar las estadísticas de repitencia de la provincia, pero no servirá para mejorar la calidad de los aprendizajes”, finalizó Romero.