Escandalosos cruces en TV tras denuncia por maltratos y abusos en hogar de menores
El conflicto se hizo público tras una cobertura que se realizó en el canal Crónica este jueves 16 de febrero en horas del mediodía. El lugar trabaja desde el año 2005.
Se trata del Hogar Siand (Servicio Integral Al Niño Desamparado), ubicado en la calle J. Laris, cerca del barrio San Carlos de nuestro distrito. El cruce de críticas fue entre un responsable del lugar y un ex trabajador del mismo, con quien habría otro conflicto por una vivienda que hay en el mismo predio. Existen varias denuncias por golpes, torturas y no descartan situaciones mayores.
En primer lugar, Augusto Albornoz, coordinador del hogar, señaló que "laburamos a fuerza de pulmón para que los chicos estén bien hace 18 años. Yo estoy todos los días 10 o 12 horas con los chicos, vienen con distintos problemas familiares. Acá está todo transparente, están felices".
Respecto a los cuestionamientos, aclaró que "se quieren quedar con la casa del fondo, hay unos ocupas y por eso nos manchan. Nosotros trabajamos por los niños. Es feo pasar esta situación, no estamos para hacer farándula, nosotros trabajamos". Y agregó: "Todos los títulos que ponen sobre el hogar son falsos. Yo salí a pescar con algunos niños y volveremos luego. Con las denuncias algunas yo no sabía, me parece perfecto que vengan inspectores y jueces. Trabajamos para el barrio y darle lo mejor a los chicos. Me parece bien que investiguen y sigan adelante con los juicios. Seamos conscientes que hay niños de por medio".
En el mismo móvil se encontraba Martín Nazareno López, ex empleado del lugar que se desempeñaba como chofer y casero, quien contó que "las pruebas hablan por sí solas, yo no soy un ocupa o un usurpador. Que él nos denigre no me importa, hay una contrato de comodato, viene como colaborador, como casero. Yo trabajaba acá como chofer y casero, yo no tengo ninguna intención de quedarme con una propiedad ni de sacarle un caramelo a los niños".
En este sentido, expresó que "hay todo tipo de maltratos, cachetazos, meterlos en una celda, en un corral, arrastrarlos del pelo. Uno puede mentir, esconderse, buscar al mejor abogado que exista pero cuando las pruebas están ya está. Esos nenes levantan carretillas, troncos. Son criaturas con discapacidad, que aprendan de jardinería o manualidades no lo veo mal de ninguna manera. Yo lo que relaciono es que estén constantemente haciendo eso y si no lo hacen les pegan, no les dan de comer o los encierran en un cuarto".
Consultado por las denuncias, López indicó que "desde la primera semana que ingresé, esa denuncia tiene 3 años, fue en diciembre de 2018 que se inauguró esta quinta. Vinimos juntos, los conozco antes de este hogar. Yo llevaba los nenes a mi casa, a pasear, contraté un micro de larga distancia y fuimos con los chicos. Yo era colaborador. Cuando yo denuncié esto se les acaba el negocio. Por cómo los tratan es un negocio. Hay una persona que trabajó acá, que tomó mi lugar como chofer, él había tomado una foto de los chicos enjaulados. A mi me despidieron en la pandemia, cuando hice la primera denuncia. Cuando se dieron cuenta que los filmaba me dijeron que podía terminar preso porque no podía grabarlos, son chicos judicializados. Por eso agradezco estar haciendo esto, sino queda todo en la nada".
Por último, sostuvo que "lo hago por los chicos, no porque perdí el trabajo, que se acabe el negociado. Yo trabajo, siempre trabajé, lo mismo mi mujer. Si no me fui a alquilar otra propiedad es por esta lucha de que esta gente sea expuesta, que traigan psícologos y digan la verdad". Y amplió: "Si yo me hubiese ido, nadie hubiese pasado las fotos porque fui el único que hizo la denuncia, que buscó un abogado. A Niñez fui en tres oportunidades y no me recibieron, les quise mostrar lo que hacían y me cerraron la puerta en la cara".