Así lo afirma una joven a raíz de lo que le pasó a su pareja. Ocurrió en la esquina de Whelan y Bernardo de Irigoyen el 4 de marzo, según indicó.
Chocado por respetar las normas de tránsito, y nada menos que con la diferencia de proporciones de una moto embestida de atrás por un colectivo. Esa es la indignación de Brisa, una joven que se comunicó con La Posta para dar a conocer la situación, que tuvo lugar en los últimos días en pleno centro de General Rodríguez.
Según comentó la joven, la moto, una Suzuki 150 conducida por un vecino de la zona de La Fraternidad, de 22 años, frenó en el semáforo en rojo en la intersección de Pedro Whelan y Bernardo de Irigoyen. Sin embargo, el colectivo que tenía detrás, con terminal en Luján, no habría tenido los recaudos necesarios y, como consecuencia, embistió la moto.
Afortunadamente no se trató de un accidente grave, pero por las dimensiones de los vehículos involucrados, podría haber pasado a mayores, y por nada menos que no respetar las normas de convivencia vial en pleno centro de nuestra localidad. Quedan el mal momento (seguramente también para los pasajeros que iban a bordo del transporte público), el susto y la moto dañada.