Crimen de Lautaro: desgarrador pedido de justicia frente a la Municipalidad de General Rodríguez

Lautaro de 18 años, había salido de estudiar el secundario nocturno de la Escuela Media N.º 1 el pasado jueves 23 de marzo y se dirigía a su casa cuando un hombre lo interceptó para robarle el celular. Lo corrió y lo apuñaló por la espalda y sospechan que fue porque lo habría conocido. Los manifestantes pidieron explicaciones al intendente y hablaron en medios nacionales.

Este lunes 27 de marzo por la mañana, vecinos de General Rodríguez y familiares de Lautaro Romero se reunieron en la plaza, "Martín Rodríguez", frente a la Municipalidad junto a amigos y allegados del joven, para realizar una marcha pidiendo seguridad. Al lugar, se acercaron móviles de distintos medios nacionales, para registrar el avance del caso.

Vecinos y amigos manifestaron lo bueno y cariñoso que siempre fue Lautaro

La madre del joven manifestó: "A Lautaro no me lo devuelve nadie, no sé cómo vamos a hacer, es muy difícil, era el hermano más chico".
Relató cómo fueron los momentos previos a enterarse de la trágica noticia: "Me quedé a esperarlo a que llegue del colegio y ahí fue cuando recibimos la llamada de Antonella (hermana de Lautaro) que nos avisó que la habían llamado diciendo que había un chico lastimado cerca de la casa de una amiga y nos dijo que vayamos a ver. Después lo confirmamos y fuimos todos al hospital a esperar.
Primero salieron a decirnos que estaba estable, que era una puñalada nada más y que estaba estable, pero iba pasando el tiempo y no salía nadie más a decir nada. Después salieron cinco o seis cirujanos y ahí nos explicaron que Lautaro había llegado sin vida al hospital, que ellos lo reanimaron ahí, que lo estabilizaron, que entró en paro de vuelta, que lo volvieron a estabilizar, y ya al tercer paro que hizo no lo pudieron salvar".

Antonella, la hermana de Lautaro, sosteniendo un cartel pidiendo justicia, se refirió al autor del homicidio: “Aparentemente, está detenido, oficialmente no nos han dicho nada, no nos han mostrado nada, estamos pidiendo por favor que se acerque la fiscal para poder mostrar todo lo que demuestra que fue el asesino”. Y agregó: “por favor que no lo liberen, que no salga, que pague, que se muera ahí”.

Una vecina de la hermana, enojada por la situación, expresó: “No queremos otro Lautaro, queremos seguridad en todos lados”. 

Otra mujer explicó por qué el chico caminó esas cuadras a esa hora de la noche y dijo que “el último colectivo entra 21:30 y después no hay más”. Posteriormente, otra indicó: “la idea es que extiendan el horario, porque hay gente que viene de trabajar muy tarde y también tiene que transitar la zona, por el motivo que sea, mismo si tenés que ir corriendo de urgencia al Hospital, tampoco tenés como transportarte porque ya el colectivo no pasa”.

Antonella, cuando tuvo que describir a su hermano, expresó: “Él era trabajador, respetuoso, responsable, ayudaba a quien sea. Al otro día tenía que ir a trabajar. A la noche, no sé en qué horario tenía un partido con mi hermano”. 

Sobre el agresor, detenido e identificado como Aaron Taborda y si conocía a Lautaro, Antonella indicó: “al parecer lo conocía, cuando lo atacó. Él era de ahí del barrio, así que supongo que nos conocía, además era compañero de trabajo de mi hermano más grande”. 

Con respecto a Taborda, era compañero de trabajo del hermano de Romero en una empresa de recolección de residuos. No se sabe si tenía trabajo en ese momento, o si seguía trabajando en el lugar. Inclusive, algunos vecinos dijeron que él había salido de la cárcel hacía tres meses.

“Había estado preso, había salido hace tres meses. No queremos más esto. Los chicos tienen que salir a trabajar, a estudiar. Mi hija trabaja de noche en un quiosco de 24?hs. Tiene que salir caminando porque no hay colectivos, yo la tengo que llevar arriesgándome también con en moto”, expresó una vecina. Y agregó: ”queremos seguridad, todos los vecinos acá le exigimos a una quinta que está en la calle Tucumán, que despeje la vereda, porque ahí se meten todos, es un monte, el dueño se niega a liberar la vereda y a cortar todo eso que tiene. Eso es una cueva y ahí vive este tipo, ahí a tres cuadras”.

En tanto, una vecina del tío de Romero indicó que el intendente les dijo que recibiría a la familia en la oficina, momento en que los demás comenzaron a gritar pidiendo "que de la cara".

Luis, el papá de Lautaro, expresó: “Que dé la cara, la gente lo eligió, tiene que responder a la gente que lo eligió. Hay muchas cosas para hacer y evitar estas cosas”.

El intendente municipal salió luego y respondió a los medios sus preguntas y más que nada orientó la cuestión al debate de los recursos y la necesidad de ajustar el número de habitantes, con los presupuestos requeridos para el verdadero número de personas que viven en la ciudad, algo que años atrás no se debatía en la política y que nuestra web ha insistido por años, sin embargo, la conferencia del intendente fue casi una confesión pública de la falta de acompañamiento provincial y nacional en esta materia, un reproche que si no fuera por esta circunstancia, jamás se ve a un intendente admitir, ya que lo enfrenta con su propia conducción superior.

Esto pasó del mismo modo con las últimas gestiones, puesto que Kubar no criticaba a Vidal ni a Macri y Anghileri no criticaba a Scioli o Cristina Fernández cuando eran gobierno. Pareciera que cuando se está al frente del poder, se debe pleitesía al líder político por encima de la necesidad del propio distrito que elige al intendente de turno y esto, sigue siendo un sistema poco democrático y cuasi feudal.

Cómo fue el brutal crimen de Lautaro Romero

El jueves 23 de marzo, Lautaro salió del colegio donde cursaba el último año del secundario y caminó hasta la estación de General Rodríguez, donde esperaba un colectivo que lo dejara en ruta 7 para volver a su casa en el barrio Villa Vengochea.

El asesinato ocurrió en la esquina de las calles Caseros y Estrada. Según las imágenes registradas por las cámaras de seguridad, Aaron Taborda (29) se acercó para robarle el celular. Romero intentó escapar y Taborda le propinó tres puñaladas. 

Cuando Taborda huyó, Lautaro fue asistido por vecinos, que lo encontraron agarrado de una reja, desvaneciéndose y perdiendo mucha sangre. Si bien, fue trasladado de urgencia al Hospital Vicente López y Planes, falleció tiempo después como consecuencia de las lesiones propinadas por el delincuente.

Personal de la Delegación Departamental de Investigaciones (DDI) local, tras ver las imágenes de las cámaras de seguridad de un vecino, allanaron un domicilio ubicado en Maestro Argentino y Salta, a 12 cuadras del lugar del crimen, donde detuvieron a Taborda y la investigación quedó en manos de la Fiscalía 10 de Moreno-General Rodríguez.