"Estoy con miedo": la angustia de una joven a la que le desvalijaron la casa en el barrio Villa San Martín
El hecho ocurrió el miércoles 29 de marzo por la noche. La víctima se enteró del robo el jueves 30 por la tarde cuando llegó a su casa y vio las puertas rotas y el lugar todo desordenado.
Florencia, de 28 años, vive en las calles Chutro y 25 de octubre, en el barrio Villa San Martín. Entraron a su casa el miércoles alrededor de las 22 cuando ella no estaba. Al llegar al domicilio el jueves cerca las 18, vio los destrozos y todo lo que faltaba.
Los delincuentes ingresaron a la vivienda tras saltar una puerta de madera de 1 metro de altura y forzar la puerta de entrada. La joven no sabe si entraron por el porche o por el costado donde tiene una ligustrina, que por la noche está oscuro debido a que no hay luz en la calle.
Según la información que le dieron los vecinos, ese día hubo dos hombres con desmalezadora sentados en la vereda de la casa contigua, pero no hay registros de sus caras, ya que, en cuanto a la presencia de cámaras zonales, la que posee el kiosco, no llega con el ángulo a captar la vereda de enfrente del domicilio y los sospechosos nunca pasaron por el local.
En cuanto a los objetos que se llevaron del lugar, la mujer contabilizó una computadora portátil color gris –otorgada por el Ministerio de Educación-, una tablet blanca –otorgada por el Municipio de General Rodríguez-, un ventilador, una garrafa de 10?kg color naranja, una cámara de fotos digital marca Kodak color negra, un secador de pelo, dos planchitas de cabello, una buclera, 6 pares de zapatillas e indumentaria femenina, un aire acondicionado blanco portátil, una caja completa de productos de Natura, $5000 aproximadamente, una licuadora, una tostadora, dos ollas, dos neceser con productos escolares y una caja con bisutería.
“Trabajo de auxiliar de limpieza en una escuela, estudio profesorado de educación primaria, y ahora no tengo computadora para mis estudios”, indicó la joven.
Con respecto al COM, le dijeron que en las imágenes de video de ese día solo quedaron captados un auto marca Escort color bordó, todo oxidado y una moto negra a su lado, que supuestamente pararon sobre la calle Chutro.
“Ahora tengo que pagar una puerta, rejas para dos puertas y cámaras”, expresó con bronca. Y agregó “ahora estoy en un grupo que se armó ayer entre vecinos para cuidarnos y protegernos entre nosotros”.
“Encima, el 21 de enero, también había sufrido un robo en la calle Rivadavia, casi esquina Argerich, donde me sacaron la mochila”, expresó con angustia.
La madre de la joven, también se expresó y nos decía esto: "estoy re caliente. Ayer me recorrí todas las casas de los vecinos, y entre 30 hicimos un grupo de WhatsApp para ir avisándonos entre nosotros si vemos algo sospechoso". Y agregó que: "nos vamos a reunir para hablar sobre qué tipo de seguridad queremos, vamos a estar los vecinos de las calles, Dimarco, Chutro, 12 de Octubre y Castelli, toda la zona que está entre el barrio San Martín y Arrarás".
La familia enojada recalca que están hartos de la inseguridad, y de vivir denunciando hechos delictivos que, cree, están vinculados a la granja de rehabilitación y "al aguantadero a dos o tres cuadras" de la vivienda, y que "fomentan que en la zona siempre haya distintos sujetos desconocidos".