La familia de Agustín Valdez acusa a un pariente de hacerles vivir una pesadilla: "No quiere cambiar"
La familia del chico que hace meses sufrió un trágico accidente, denuncia que además padece distintos robos por parte de un pariente, que hasta le sacó ropa a Agustín.
Como si fuera poco, la angustia por el accidente de Agustín Valdez, el chico de 17 años que hace siete meses chocó con su moto en Ruta 24 y continúa peleando por su vida en el hospital (siniestro además en el que encima de todo falleció su novia), su familia debe lidiar con otro problema. Y es que denuncian que sufren los robos de un pariente suyo, que hasta hurtó la ropa de Agustín de su placard, mientras él sigue internado.
Quien contó los hechos a La Posta es Camila, hermana de Agustín y cuñada del hombre acusado de los robos (se trata del hermano del marido de ella). La gota que rebalsó el vaso fue el hurto ocurrido este jueves, cuando el responsable de estos robos, de 27 años, se acercó al local lindero al domicilio en cuestión –en el que no es bienvenido-, a ver a su madre, una señora mayor con problemas de salud. Siempre según el relato de Camila, ocurrió que la mujer tuvo una caída, momento que su hijo aprovechó para, con la excusa de ayudarla, ingresar a la casa (donde no había nadie más en ese momento) y, una vez más, robar dinero y objetos personales.
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En la vivienda, ubicada en la calle Belgrano cerca de la esquina con Florida de General Rodríguez, viven Camila, su marido, sus dos hijos y la madre de él. “Estamos cansados. Se llevó hasta la alcancía de mi nene de 7 años. Intentamos ayudarlo un montón de veces pero él no quiere cambiar, le roba a todo el mundo” contó resignada Camila.
La mujer agregó que el acusado “tiene denuncia por violencia de género, pedido de captura y sigue caminando como si nada, también tiene una denuncia en Morón por encubrimiento de robo automotor”. Afirmó que además tuvo que cumplir dos años de arresto domiciliario en Paso del Rey. “Anda perdido en la droga”, sostuvo Camila, “le robó al padre, a la madre, es un desastre”. Y como si todo esto fuera poco, “le abrió el placard a Agustín y se llevó ropa de él”.