El Municipio firmó un convenio con la Universidad de Luján para reforzar la prevención de una peligrosa enfermedad
Desde la Dirección de Bromatología de General Rodríguez comunicaron que se realizarán análisis de muestras de triquina de manera gratuita.
La noticia está dirigida a quienes son productores y elaboradores locales de alimentos en la ciudad. Quienes se dediquen a la fabricación de alimentos para consumo humano, sea para su venta o consumo personal, deberán dirigirse al edificio de Bromatología que se encuentra ubicado en Puente Harris y Puerto Cadenas, de 06 a 17.
Para más información, deberán contactarse al teléfono 02374853942 o por correo electrónico a [email protected].
¿Qué es la triquinosis?
Es una enfermedad producida por un parásito con forma de gusano que se encuentra alojado en los músculos de los cerdos y otros animales salvajes, como el jabalí y el puma.
Las personas se contagian de modo accidental, debido a la ingestión de carne o derivados cárnicos, crudos o mal cocidos, que contengan larvas del parásito vivo. En Argentina, la principal fuente de infección para el ser humano es el cerdo doméstico.
¿Cuáles son sus síntomas?
Las personas pueden presentar: fiebre, dolores musculares, diarrea, vómitos, hinchazón de párpados y picazón. Si se llega a tener cualquiera de estos síntomas, se debe acudir inmediatamente al centro de salud más cercano.
¿Cúal es el tratamiento?
Hay medicamentos que se pueden usar para tratar la infección reciente, pero no hay un tratamiento específico para la enfermedad, ya que una vez que las larvas invaden los músculos, los quistes perduran durante años. Los analgésicos, solo pueden ayudar a aliviar el dolor muscular.
¿Cómo se puede prevenir?
Para evitar contraer triquinosis, lo importante es:
- Consumir carne de cerdo y derivados frescos y bien cocidos. Es fundamental cocinarlos hasta que desaparezca el color rosado. Hay que tener en cuenta que salar o ahumar la carne NO es suficiente para matar al parásito.
- Adquirir los productos derivados, chacinados y embutidos (como jamón, panceta, longaniza, chorizos) solamente en comercios habilitados. Verificar en la etiqueta que hayan sido elaborados por empresas autorizadas donde se especifique marca, identificación del lote, fecha de elaboración y vencimiento, identificación del establecimiento elaborador y registro ante la autoridad sanitaria (RNE y RNPA). La venta callejera de estos alimentos está prohibida.
Para zonas rurales y criaderos:
- Respetar las normas establecidas por los servicios veterinarios para la cría de cerdos.
- Todos los establecimientos que críen cerdos (en pequeña o gran escala) deben poseer su RENSPA, que es el Registro Nacional Sanitario de Productores Agropecuarios otorgado por el SENASA.
- Los cerdos deben ser criados en instalaciones adecuadas sin presencia de roedores y deben ser bien alimentados. Debe evitarse alimentarlos con basura, desperdicios de mataderos o residuos de casas de comida y restaurantes, ya que en ellos puede haber restos de alimentos contaminados con el parásito.
- Asegurar una correcta disposición de los alimentos para los cerdos (condiciones de almacenamiento, condiciones edilicias del depósito de alimento), para prevenir la infestación de roedores y animales silvestres.
- Al realizar la faena de los animales, incluso si se realiza de manera doméstica, es importante consultar al veterinario y pedir el análisis de una muestra de diafragma (entraña) de cada res a fin de confirmar la ausencia del parásito que provoca la triquinosis a través de la técnica de digestión artificial.
- Se deberán eliminar los cadáveres de cerdos y otros animales para que no puedan ser consumidos por otros animales del lugar.
- Si se encuentra el parásito en un animal, es necesario eliminar la res completa.
- Si se produce chacinados o embutidos para autoconsumo, recordar hacer el análisis bromatológico de la carne de cerdo o animal utilizado con el municipio.
Cabe recordar, que a principios del 2019, la UNLU había detectado un caso positivo de la enfermedad en una muestra de carne en General Rodríguez.
En ese caso, la muestra de carne de cerdo tomada había sido proveniente de un vecino de nuestra ciudad, cuyo destino sería su consumo como carne fresca.
En ese momento, el Inspector zonal, había comunicado que tras el análisis de la muestra y su posterior confirmación, se habían establecido todas las denuncias pertinentes a los organismos oficiales y se había procedido al decomiso de la carne y faena sanitaria del resto de los animales que se encontraban en el mismo predio de origen.