Seguridad 12 JUN 2023

Nueva denuncia a un ex funcionario municipal vinculado a estafas inmobiliarias: "Abusó de una amistad"

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En las últimas horas, un hombre de 53 años radicó una denuncia penal contra Javier Ortellado, ex director de Ingresos Públicos durante la gestión del intendente Darío Kubar que ya había sido acusado por varias personas por vender propiedades de forma irregular.

En julio del año pasado, agentes de la Policía de la Ciudad allanaron el Palacio Municipal de General Rodríguez para buscar documentos vinculados a una causa con varias denuncias por estafa. Javier Ortellado, ex funcionario durante la gestión de Kubar, había dejado su cargo en medio de un escándalo.

En el expediente, radicado en el Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional N.º 4 de la Ciudad de Buenos Aires, a cargo de Martín Yadarola, se mencionaban denuncias penales a una inmobiliaria llamada "Cano Russo" y se buscaron papeles que acrediten la venta ilícita de distintos lotes y propiedades. 

El descargo de Javier Ortellado

Hacia fines del año pasado, La Posta pudo acceder al descargo que hizo Javier Ortellado sobre las acusaciones que pesaban sobre él. Lo primero que hizo fue remarcar que él trabajó como director de Ingresos Públicos municipal entre diciembre de 2015 y julio de 2016, renunciando "los primeros días de julio de 2016, mientras que el hecho investigado se remonta a mediados del 2017". Luego comentó que realizó trabajos de asesoramiento profesional en el ámbito privado hasta que un día, un amigo suyo, Luciano Collazo, "me comentó de alguien que tenía intenciones de llevar a cabo un negocio inmobiliario, pero necesitaba ayuda y asesoramiento".

Así, le presentó a Gustavo Parano y su esposa, Cecilia Cano Russo. Ella tenía una inmobiliaria y él era el representante legal de la empresa. Le ofrecieron trabajar con ellos en la venta de terrenos y otras operaciones comerciales inmobiliarias en la zona de General Rodríguez y él aceptó, dedicándose a la venta de los lotes que la empresa manejaba. 

Para hacerlo, establecieron una sociedad comercial llamada Lepontinos SRL y Ortellado aseguró que para 2018 dejó de trabajar con la pareja porque ellos le habrían transmitido que había bajado la demanda de lotes que vendían. A su vez, remarcó que luego le fueron llegando comentarios de personas que habían sido estafadas por la inmobiliaria Cano Russo y que al comprar un terreno y llegar a él, otras personas los atacaban diciéndoles que ya tenían dueño.

También se ocupó de decir que no tiene contacto hace años con Cecilia Cano Russo y Gustavo Parano. También que lo dejó de atender el amigo que los presentó, Luciano Collazo, y que pese a tener contacto directo con cada cliente por ser la cara visible para vender los terrenos, "las inmobiliarias consiguen 'productos', le llaman así a las propiedades que se tienen para enajenar. Cómo, cuándo o de quién se consigue la autorización para enajenar ese producto, lo desconocía, desconozco y desconoceré siempre, ya que a mí me otorgaban las carpetas con ubicaciones, catastros, impuestos y demás de cada parcela, las cuales optaba por enajenar tal como ordenaba mi mandante y eventual empleador". 

"Comprendo que haber sido la cara de una inmobiliaria que defraudó a diferentes compradores o que se me haya situado hoy en día aclarando los puntos aquí expuestos e incluso realizando un enroque de posiciones, yo haría lo mismo que las víctimas: iría por todos, incluso el pobre empleado que me haya atendido", agregó Ortellado. Y pide a la Justicia que cite a declarar a su amigo Collazo y a Luciano Loreto, un hombre de nacionalidad paraguaya que figura como cediente de uno de los terrenos y es señalado como parte de la asociación ilícita que presumen que habrían formado Cano Russo y Parano.

La nueva denuncia radicada este lunes 12 de junio

Un hombre de 53 años hizo la denuncia penal contra el ex funcionario, al que acusó de haberlo estafado con una inversión inmobiliaria. Remarcó que eran amigos hacía dos años y él solía ir a su casa en el country El Nacional, donde firmó un documento que "él y Patricia Ortellado se quedaron para certificar, pero nunca me dieron copia ni nada. Abusaron de una amistad".

La víctima aseguró que les entregó $1,9 millones y nunca se lo devolvieron. Dijo que le enviaban documentos apócrifos bancarios para referirle que el banco les había retenido el dinero y le prometían esa devolución, hasta que en un llamado telefónico durante el que discutieron, Javier Ortellado "me dijo que iba a ser 'boleta' si trataba de cobrar" esa plata. Luego acusó que el acusado cambió su teléfono y agregó el dato de que él "operaba bajo la empresa OVOCE SRL".

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FERRETERÍA ROVI