El club ubicado en el barrio rodriguense lleva adelante una serie de trabajos que buscan mejorar cada día las instalaciones del predio donde practican y compiten jóvenes de la zona.
Deportivo Mi Rincón es un club rodriguense que se fundó en el año 2019 pero la pandemia le provocó obligatoriamente un parate. Emplazado entre las calles Tandil, Las Flores, Pila y Escobar del barrio que le dio nombre a la institución, retomó sus actividades en 2021 y desde ahí no paró hasta esta actualidad que lo encuentra en pleno crecimiento.
A pulmón, con mucho sacrificio, su presidente Damián Luna y el resto de la comisión directiva recibe a 90 chicos y chicas del barrio. "Cuando retomamos después de la pandemia empezamos a participar en liga y continuamos hoy en día todos los sábados", destacó Damián a nuestro medio.
A su vez, agregó que "el lugar antes era un campo abandonado, hicimos una cancha y un buffet con dos baños. Ahora estamos en construcción de dos baños e instalando la nueva iluminación. Vienen 90 chicos entre nenes y nenas. Competimos desde la categoría 2010 hasta la 2016 y en la liga municipal tenemos compitiendo primera masculino y primera femenino".
El club sabe de la importancia que tiene en lo barrial y el lugar de contención que significa para los jóvenes. Es una responsabilidad que quienes lo presiden conocen y ese trabajo fue halagado cuando recibión un reconocimiento a nivel municipal. En la actualidad se realizan los trámites para que también lo sea a nivel provincial.
"Nosotros hacemos jornadas sábados por medio y con lo recaudado vamos comprando lo que necesitamos. Pusimos una cuota de 500 pesos que no es obligatoria pero es un barrio muy humilde este y de los 90 chicos solo lo pagan 30. No podemos obligar a nadie que pague una cuota por obligación, primero porque la situación no está para gastar 500 o 1000 pesos por mes y segundo porque nos quedaríamos sin chicos por ahí, hay otras cosas más necesarias", reconoció por último su presidente.
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