El misterio de una casa que "desapareció" y la sospecha: ¿A Fernando Pérez Algaba lo mataron en General Rodríguez?
Luego del rastrillaje que la Policía Bonarense realizó en el predio del loteo del country Renacer, en Ruta 7, la Justicia continúa analizando pistas que refuerzan la hipótesis de que al empresario lo asesinaron en nuestro distrito.
El emprendimiento inmobiliario había conseguido en mayo pasado la autorización del Concejo Deliberante para avanzar con su negocio, pero no sin dividir al oficialismo y la oposición, dado que hubo concejales de ambos bloques que se opusieron. Allí estuvieron hace una semana los agentes de la DDI de Lomas de Zamora buscando pistas sobre el crimen de Pérez Algaba, que fue hallado sin vida y descuartizado en un arroyo de Ingeniero Budge.
Es que, por la declaración de dos ex socios del empresario, se supo que Fernando Pérez Algaba estuvo en ese predio de General Rodríguez y se presume que puede ser el último lugar donde se lo vio con vida. Hasta ahora, la información que se maneja es que no hay filmaciones de cámaras de seguridad que hayan captado a quienes arrojaran las valijas y bolsas con las partes descuartizadas de su cuerpo en el Arroyo del Rey.
Una por una, las pistas que hacen crecer la sospecha de que el homicidio fue en General Rodríguez
1. La ubicación de su celular. La Justicia ya tiene establecido que el 18 de julio fue el último día que su celular estuvo activo y la última ubicación que dio fue la de General Rodríguez.
2. La declaración de sus dos ex socios. Ese día, según el testimonio de dos ex socios de Fernando Pérez Algaba con quienes había tenido conflictos previos, él se reunió con ellos para cobrarles una deuda que tenían con él. Según investigadores, ellos eran Maximiliano Pilepich y Nahuel Vagas y le debían U$S 150.000. A mediados de julio, dijeron, le devolvieron la mitad en una escribanía de Castelar y el 18 de julio se reunieron allí para darle los U$S 75.000 restantes. Al predio llegó Fernando Pérez Algaba con una camioneta Land Ranger Rover modelo 2012 que pertenecía a uno de estos deudores y que se había quedado como "garantía" de pago. Cuando le dieron el dinero, se las entregó y estos sujetos revelaron a la Justicia que se fueron y el empresario quedó solo allí con la valija, con el dinero. Se cree que puede haber sido asesinado ese mismo día, por lo que arrojó la autopsia sobre su cuerpo, que apareció cinco días después descuartizado.
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3. La camioneta Mercedes Benz "fantasma". Lo cierto es que Pilepich también dijo (sin precisar fecha, hora y medio utilizado) que volvió al lugar para buscar una camioneta Mercedes Benz G500 (hay muy pocas unidades en el país y cuesta U$S 338.000) y el vehículo estaba pero Fernando Pérez Algaba ya se había ido. Sin embargo, cuando se revisaron las cámaras de seguridad de la zona no se encontró registro de dicha camioneta saliendo del lugar. Se sospecha que haya salido por un camino vecinal que termina en un sector donde no hay cámaras. Una camioneta de esas características fue captada en la zona oeste del Conurbano cerca de la antena que captó la última señal de celular del empresario asesinado una hora antes, en el mismo lugar donde se reunió con sus ex socios.
4. La declaracion de la escribanía de Catelar. En su declaración, los responsables de la escribanía de Castelar donde los sospechosos dijeron haber pagado la mitad de la deuda a Fernando Pérez Algaba, remarcaron que no presenciaron ninguna operación de ese tipo entre ambas partes.
5. La casa que "desapareció". En el predio del country Renacer, la Justicia determinó que hasta el 25 de julio pasado, en uno de los extremos, había una casa que formaba parte de una quinta dentro del desarrollo inmobiliario cuando los inversores compraron los terrenos para hacer el loteo. Sin embargo, cuando fueron los efectivos de la DDI de Lomas de Zamora, no hallaron ningún vestigio de la vivienda ni tampoco escombros. Se cree que en ese lugar, donde ahora hay cimientos, los autores del asesinato habrían derrumbado la vivienda donde lo mataron y se llevaron los escombros para no dejar rastros de la escena del crimen. Luego, habrían encargado a otros cómplices desaparecer el cuerpo, descuartizándolo y llevándolo a Ingeniero Budge con las partes en valijas para arrojarlas al Arroyo del Rey, con el objetivo de responsabilizar a un sector de la barra brava de Boca que raliza extorsiones en la zona de la feria La Salada.