Lo mandaron a la casa con la promesa de una cirugía y una prótesis pero ahora enfrenta una situación crítica
Sebastián Raia (37) es un vecino del barrio Güemes que el 17 de agosto sufrió un grave choque en la Ruta 24 cuando volvía de su trabajo. Estuvo internado en el hospital de Moreno y tras la promesa de una prótesis, le dieron el alta hasta la fecha de la cirugía. La misma nunca se hizo y ahora su familia se encuentra en la incertidumbre y él con riesgo de perder una de sus piernas.
Las prótesis tienen un costo de $1.300.000 y a su familia le resulta imposible pagar esa cifra. Los médicos les habían asegurado que Sebastián debe operarse cuanto antes, ya que una infección podría empeorar su estado, al punto de necesitar una amputación de una pierna. Incluso también podría afectar su médula ósea y requerir un trasplante, además de que el tiempo puede hacer que los huesos se suelden mal. "Tiene el tiempo en contra. Nos dicen que cuánto más tiempo pase, más complicada va a estar su situación", había explicado Alejandra, su mujer, a mediados de septiembre.
Días después de la nota de La Posta, la mujer contó que habían hablado con el secretario de Salud de General Rodríguez y "nos dijo que ya están casi todas las prótesis aprobadas y que una vez que ya esté todo aprobado se define la fecha de entrega con la empresa. Además, el Hospital Mariano y Luciano de la Vega le garantizo la fecha pactada de la operación, que es para el 30 de septiembre. Para evitar una infección hospitalaria, en el hospital me dijeron que va a tener que estar en casa Sebastián hasta el día de la cirugía".
Sin embargo, las prótesis nunca llegaron y la operación nunca se realizó. Alejandra contó que si bien "Gustavo Tummino ha estado muy presente, dice que las prótesis se están gestionando, no ha dejado de responder, pero hemos sabido que hay un problema con la empresa que las fabrica, Prima S.A, que tiene convenio con el Estado y que tiene demorada entregas de prótesis a muchos pacientes de PAMI incluso".
En ese sentido, la situación de Sebastián quedó marcada por la incertidumbre. Está en su casa, tiene muchos dolores y no hay en el horizonte cercano novedades sobre las prótesis ni la cirugía, una intervención que necesita con urgencia. "Estamos desesperados", cerró Alejandra.
Cómo fue el accidente que le cambió la vida a Sebastián
El 17 de agosto pasado, regresaba en moto desde su trabajo en Pilar y en la ruta 24, a la altura de la calle Rembrandt, en el límite entre General Rodríguez y Francisco Álvarez, fue impactado por una camioneta y sufrió severas lesiones.
Sebastián, que es padre de una niña de 11 años, trabajaba como albañil en el country San Sebastián de Pilar y también como repartidor. Aquel 17 de agosto había salido del barrio privado unas horas antes y, alrededor de las 15:30, sufrió el accidente vial que le cambió la vida.
Según relató su compañero ante la policía al hacer la denuncia, ambos iban en dirección a General Rodríguez y cruzaron un semáforo, cuya luz se puso amarilla mientras lo atravesaban. Fue en ese momento que vieron cómo una combi que venía en dirección opuesta hizo un giro en U y los impactó. Quien se llevó la peor parte del choque fue Sebastián, quien sufrió lesiones muy graves en sus rodillas y múltiples fracturas en otras partes del cuerpo.
Como primero llegó la policía del cuartel quinto, trasladaron a Sebastián al hospital Mariano y Luciano de la Vega de Moreno. Tras las radiografías de urgencia, se detectó que el hombre padeció fractura de fémur y rótula izquierda, fractura de tobillo derecho, fractura de tibia derecha y también del platillo tibial. Desde esa tarde quedó internado hasta el día de hoy y su estado de salud es muy complicado.
Alejandra, su esposa, contó que "Nos costó mucho conseguir datos del dueño de la combi, porque la policía del cuartel quinto solo le pidió DNI, dominio y nombre al conductor. Lo único que sabemos es que pertenece a una empresa de reparto de yerba. Hasta el momento, nadie vino siquiera a preguntarnos si necesitábamos algo".
La situación de Sebastián es crítica porque necesita una cirugía urgente. Su esposa reveló que "el tiempo es oro" y que ya hicieron el pedido de las prótesis necesarias al Estado, pero su entrega puede demorar entre 6 meses y un año, y él necesita la intervención quirúrgica mucho antes. También contó que Sebastián tenía una cobertura de seguro de Sancor Seguros, entidad ante la que ya hicieron trámites, pero también demorará el pago.