El drama que vive una familia tras un incidente con una banda de delincuentes: "Nos arruinaron la vida"
El martes 10 de octubre protagonizaron un violento choque luego de que dos ladrones impactaran con un auto al vehículo en el que iban una mujer junto a su pareja y dos hijos menores de edad. La historia detrás de ese accidente que rememora a un gran dolor familiar.
Una familia rodriguense fue chocada por un Fiat Palio cuando ellos iban a bordo de su Renault 9 a la altura de la calle Laguna Clara, frente a la base del Comando de Patrullas, en el barrio Los Troncos. Una de las integrantes de las víctimas que sufrieron distintos tipos de heridas es Camila Almada, la hermana de Agustín Valdez, el joven de 17 años que murió en mayo de este año tras pelearla siete meses en terapia intensiva del Hospital Vicente López producto de un accidente vial.
Con todo el dolor que procesa hoy en día, todavía por la pérdida de su hermano, tuvo que vivir en carne propia, una situación de mucho estrés junto a su familia. Quienes los chocaron fueron un grupo de delincuentes (tres hombres, según trascendió, que iban junto a otras dos mujeres) en un Fiat Palio robado. Las jóvenes entregadas a la Policía, una tiene 18 años, de nombre Nahiara y la otra, llamada Daiana, de 27. Ambas tenían la mochila de la víctima en su poder. Ambas fueron arrestadas y trasladadas a la comisaría. El auto señalado, por su parte, figuraba como robado en la zona de Trujui.
Una de las peores consecuencias de ese accidente es que el Renault 9 en el que iban quedó destruido, el cual era la herramienta de trabajo. "Todo el mundo me conoce y sabe que voy con mis hijos, a todos lados, con ellos, incluso hasta el trabajo. Ellos trabajan a la par mía. Yo vendo comidas a domicilio, ahora retirando por mi casa. Mis familiares o amigos me ayudan cuando pueden porque estoy sacando pocos pedidos por falta de ánimo", contó Camila.
Y agregó: "Ese auto fue comprado con una indemnización por un problema de salud y lo compramos para que mis hijos puedan ir con nosotros sin sufrir frío o calor ni riesgos manejando con precaución, tenía todos los papeles hasta la VTV. Mi auto no sirve más. Tiene una destrucción total, no se hacen cargo los del seguro porque estaba manejado por delincuentes".
Para tomar dimensión de la angustia que pasan hoy en día, Camila señaló que "Yo estoy con derivación a un psiquiatra, mis hijos siguen asustados esperando derivación de psicólogos. Mi nena (2 años) sale, ve el auto y dice ´caí´ tocándose la cabeza donde se abrió. El nene (7 años) cuenta a mi familia que en el hospital vio a Agustín y le dijo que lo quiere mucho y Agustín falleció, ya hace casi 5 meses".
Cómo fue el caso de Agustín Valdez
Agustín Valdez tenía 17 años. Desde la noche del pasado 20 de octubre se encontraba en el hospital Vicente López por las graves lesiones tras sufrir un siniestro vial en el que murió su novia, Eliana, de 16 años. A bordo de la moto también iban sus sobrinos de 7 y 1 año. El martes 30 de mayo su cuerpo dijo basta y el dolor caló aún más hondo.
Ambos jóvenes fueron atendidos por personal de una ambulancia y trasladados al hospital. Ya en el lugar se supo que finalmente Eliana había sufrido un paro cardíaco en el camino y tras media hora de intentos de resucitación, no pudo resistir y falleció por las lesiones recibidas. Ellos trabajaban y se iban a llevar a los nenes y fueron por la Ruta 24.
El chico atravesó varias operaciones en su cabeza, le colocaron un botón gástrico para poder alimentarse y continuaron con intervenciones neuronales en su cabeza y otras cirugías en su brazo. Su madre, Mónica, luchó mucho para que Agustín recibiera la atención médica en tiempo y forma y agradeció permanentemente a los profesionales del Hospital Vicente López, que hicieron todo para cuidarlo.
Sus últimos problemas estuvieron relacionados con una infección que impedía que le colocaran una válvula que necesitaba para drenar líquidos que se expandían por su cráneo. La familia tenía pensado llevarlo al Hospital Rocca, en Capital Federal, para hacerle un tratamiento más complejo. Sin embargo, su cuerpo no pudo resistir más.
Camila había despedido en ese entonces a Agustín con un sentido mensaje en Facebook: "Volá alto, hermano. Hoy estás en un mundo mejor y no acá donde sólo tenemos sufrimiento. Te voy a extrañar el resto de mi vida, no hay palabras para describir tanto dolor. Una noche donde nos marcó la vida a todos y se llevó la de dos seres maravillosos. Nadie quiso dar respuestas y sacarlo a la luz. La Justicia no fue justa. En este país de mierda que jamás le va a dar nada bueno a nadie. Políticos, jueces y fiscales corruptos que tapan todo y no esclarecen nada".