Apareció Luciano, el joven rodriguense buscado por tres días: dónde estaba y cómo lo hallaron
A Luciano Sánchez Ozuna (23) lo buscaban desde el martes 20 de febrero por la tarde-noche cuando había salido de su casa para ir a ver a su hermana. Finalmente, su familia confirmó que al joven lo encontraron ayer por la tarde cerca de la estación de Morón con signos de haber sido golpeado
Durante 72 horas, familiares y amigos de Luciano Alejandro Sánchez Ozuna sufrieron la angustia de no saber el paradero del joven, el cual se encuentra en tratamiento psiquiátrico por padecer esquizofrenia, de modo que necesita sí o sí tratamiento farmacológico y asistencia médica.
Lo cierto es que, este viernes aproximadamente a las 19 hs, finalmente su hermana Pamela Calderón lo encontró en cercanías de la estación de Morón, "bastante golpeado pero dentro de todo bien", según lo que le dijo a La Posta Noticias.
La mujer, actualmente domiciliada en la localidad de Virrey del Pino (La Matanza), y a quien su hermano habría ido a visitar el martes 20 de febrero a eso de las 19.30 hs cuando salió de su casa en la zona de Pablo Marín, comentó que "yo lo encontré en la plaza de Morón que está cerca de la estación del tren, adonde va a comer la gente en situación de calle".
Y explicó que encontrar a su hermano, más que una casualidad "juro que fue instinto. Yo hasta el día de hoy (por el viernes) estaba en mi casa de Virrey del Pino porque mi mamá me decía que no me mueva porque él iba a llegar. Entonces a la mañana le dije que iba para Rodríguez porque no podía estar más sentada esperando. Yo me tomo tres colectivos para llegar siempre, y hoy en el primer recorrido me bajo y en un lugar donde hacían impresiones me hago una foto de él como las que les pasé a ustedes".
A continuación agregó que "me fui al hospital de González Catán (Simplemente Evita) y no había nada, me fui a una plaza y tampoco, luego me tomé un colectivo hasta Morón, lo busqué en esa plaza que te dije y no estaba. Me fui hasta la estación de tren, que ahí tengo que tomar el primer tren para venir acá, y había unos cartoneros que les mostré la foto. Me dijeron que no lo habían visto pero que si él andaba deambulando por la calle, que fuera después de las 19 hs que es la hora que le dan de comer a la gente de la calle".
Tras esto, señaló que siguió con destino a Moreno en el tren Sarmiento "y también fui a la plaza, mostré la foto y nada. Después termino llegando a casa de mi mamá y le comento lo que me había dicho esa gente, le digo si me acompañaba y aceptó. Se dio así. Yo sabía que lo iba a encontrar ahí en Morón, tenía el presentimiento de que si volvía lo encontraba. Cuando bajamos del tren, él estaba ahí. No me preguntes cómo. No tuve ni que moverme casi. Así que si no lo encontraban era porque no querían".
El accionar de la policía
Más allá de la alegría natural por haber encontrado a Luciano, su madre Patricia y su hermana Pamela no quisieron pasar por alto el estado en el que lo hallaron: "está todo golpeado y lastimado. Él dijo que fue la policía y los chicos que estaban con él en la calle también".
"Nos contó que supuestamente ese mismo martes que desapareció le pidió documentos la policía y no los tenía, porque se fue sin documentos. La policía le decía que iban a contar hasta diez y les tenía que decir su número de documento, pasa que si vos lo ves no te das cuenta que es discapacitado o que tiene algún problema. Porque medicado es un chico normal", añadió su hermana.
Precisamente la mayor preocupación por estas 72 horas de ausencia de Luciano, más allá de la desaparición en sí, era su medicación. El joven de 23 años toma 14 remedios por día y las convulsiones asomaban como el más grande inconveniente.
"Aparte él no sabe leer ni escribir, y como no se sabía el DNI, le pegaron y hasta lo tuvieron encerrado en el calabozo. Estuvo en la comisaría de Morón y se le ven las marcas de los palos de la policía. Él dijo que estuvo detenido hasta hoy (por el viernes) a la mañana", aseguró.
Casi a la medianoche, cuando habló con nuestro medio, Pamela Calderón expresó que su hermano Luciano se dirigía al Hospital Vicente López para constatar el grado de sus lesiones. Mientras que junto a su mamá iría por estas horas a realizar la correspondiente denuncia policial a la comisaría 2º de Malvinas.