Barrio Bicentenario: pastos altos, asfaltos destruidos y problemas acumulados en el populoso barrio de viviendas sociales
Algunos reclamos vecinales dan cuenta de que en diversos puntos del barrio se observan reductores de velocidad irregulares y hasta "improvisados", sumados a baches, árboles caídos, exceso de basura y problemas edilicios en las escuelas. La recorrida da cuenta de una traza vial que no resiste más y la necesidad de cortes de pasto en el marco de la invasión de mosquitos y la epidemia de Dengue.
A partir de la acumulación de reclamos de vecinos de la zona, se efectuó un relevamiento por distintos puntos del barrio Bicentenario para conocer el estado de situación de las calles como eje principal. El barrio se creó (con muchas dilaciones e irregularidades) a lo largo de tres gestiones de gobierno y se coronó como uno de las obras más relevantes y costosas de la ciudad, sin embargo, desde su creación, no pudo satisfacer completamente la necesidad estructural de miles de familias, pese a ser uno de los pocos espacios desarrollados y pensados desde antes del primer ladrillo.
Hoy, postergado en muchas ocasiones, tiene una dificultad importante en muchas cuestiones, las cuales resaltan los vecinos. Lo de la pobre recolección de basura es algo común a todos los barrios con el pésimo servicio de recolección que se espera cambiar en algunos meses con una nueva licitación que también trae sus dudas. Pero lo del tránsito y la falta de corte de pasto es algo bastante urgente, tanto por la cuestión sanitaria que representa el dengue, como por el riesgo que impera crecientemente en el tránsito, con cráteres que ya son imposibles de esquivar.
Además de ser visible la gran cantidad de animales sueltos por todo el barrio (un dato no menor que también habla de la necesidad de concientización al respecto), se pudo observar que los reductores de velocidad (comúnmente conocidos como "lomas de burro") son irregulares en su forma y tamaño, siendo un riesgo para los autos (desde el punto de vista mecánico) y obviamente para los peatones (desde el punto de vista técnico, en cuanto a su "efectividad").
No obstante, también hay una gran cantidad de baches y cráteres, así como de pasto invadiendo hasta el propio asfalto en diferentes tramos de la traza, incluida la rotonda.
Por otro lado, se notó en muy mal estado el frente de la escuela y la esquina de la calle Camino a Navarro al 800, con baches muy pronunciados y profundos en todas las curvas del barrio.
Asimismo, hay muchos tramos literalmente "intransitables" o donde hay que pasar a muy baja velocidad para no romper el auto, con "placas de pavimento" que están hundidas y partidas, pudiendo dejarse allí medio tren delantero, algo que claramente no se hizo de la mejor manera cuando se creó el barrio, y obviamente, no tuvo mantenimiento en los años sucesivos, lo cual deriva en una complicación tanto para los vehículos particulares como para el transporte público y "acelera" el desgaste de la estructura de los mismos.
Tal como ha sucedido en otros puntos del distrito, a partir del fuerte temporal sucedido en diciembre pasado, en los ingresos del barrio Bicentenario se vieron muchos árboles caídos, algunos incluso permaneciendo sobre el tendido eléctrico, lo cual es un potencial riesgo a futuro en caso de una condición meteorológica similar.
Como conclusión de la recorrida, y corroborando algunos reclamos vecinales que desde hace un tiempo han llegado a nuestro medio, el barrio Bicentenario muestra un evidente colapso en temas tan sensibles como el asfalto (y por ende, tránsito), la basura, el pasto alto y las escuelas, solo por citar los principales.
Una situación que amerita resolverse en lo inmediato al menos, dado que, habiendo un fin de semana "extra largo" por delante, el panorama podría ser peor en cualquiera de los ítems mencionados para todos los vecinos. Sin dudas que no es algo propio de Bicentenario, pero en esta parte del distrito se nota aún más.
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