Las picantes declaraciones de Eduardo Learreta sobre su inesperado alejamiento de Darío Kubar

En una entrevista sin desperdicio en Contame La Posta, el también ex funcionario durante la intendencia kubarista dejó frases tajantes, por momentos irónicas y hasta con cierta picardía. Por qué se fue del HCD, la "extraña" relación oficialismo-oposición, el trabajo de los concejales del bloque, el rol de Natalia Ruiz y la situación de Marcelo Basilotta, entre varios temas más   

La noticia que trascendió en los últimos días sobre el alejamiento de Eduardo Learreta del espacio de Juntos por el Cambio, conducido por Darío Kubar en el Concejo Deliberante, fue un fuerte cimbronazo tras el "veranito" que tuvo el bloque opositor después de las elecciones que arrojaron como triunfador a Mauro García. 

Porque, más allá de la relación meramente "dialoguista" enarbolada por oficialismo y oposición en los últimos meses, de manera subyacente también comenzaron a aflorar ciertas internas en el "Kubarismo". De esta manera, podemos decir que estamos ante una crisis anunciada por múltiples factores: primero la salida de Stella Maris Impiombato cuando separó su banca y formó un unibloque; luego la ida de Marcelo Basilotta al gabinete nacional sin que "se llevará" al propio Kubar a alguna estructura política más grande que la local; y la última ruptura grande fue la de Eduardo Learreta, quien supo incluso ser funcionario durante la intendencia kubarista, desempeñándose primero en la Oficina de Licencias de Conducir y después como director de Agroindustria municipal. 

En el último tiempo trabajando en la coordinación de asesorías legislativas de JxC en el HCD, Learreta fue expulsado de su función aparentemente por los dichos de un militante suyo a quien el ex intendente acusa de "ensuciarlo y difamarlo", además de que "esta semana pasó el límite porque se metió con mi familia".   

Fiel a su estilo, con su tono poco "liviano", muy sincero y hasta "picante", el dirigente habló en Contame La Posta y dijo que todas las pérdidas políticas que viene sufriendo Kubar "son por problemas de celos. Marcelo (Basilotta) se va al Ministerio de Capital Humano por conocimiento con la Ministra y por lo que entiendo había que tirar las líneas para darle más crecimiento a Darío pero no lo pudo conseguir Marcelo. Entonces se empieza a enojar Darío y comienza a romperse la amistad que había. Esto lo sé por fuera de Marcelo. Pero sé también que mucha gente del PRO le ha cerrado las puertas a Darío, ya sea Jorge Macri o Joaquín de la Torre, no sé porqué. Los celos fueron de Darío para con Marcelo". 

Asimismo al referirse a su propio conflicto, agregó que "yo sigo teniendo jóvenes conmigo. Uno de ellos es Daniel Leiva, que nunca fue nombrado acá en General Rodríguez, y él criticaba la poca actividad que tienen los concejales, algo en lo que coincido con él. Daniel tiene una actividad social enorme y nunca necesitó pedirle recursos a Darío para su trabajo social. Pero empezó a criticarlos por Facebook y eso le molestó a Darío que me llamó el otro día diciéndome que yo era responsable porque no lo había hecho callar. Considero que la libertad es fundamental, aparte él no sabe si yo le decía a Dani que baje los decibeles y quizás no me hacía caso. Pasa que Darío lo había llamado a Daniel para que baje el trabajo social porque los concejales no iban a salir a hacer nada. Realmente vos ves que algo de cierto hay porque no han salido nunca a hacer nada".  

Learreta señaló que "hace por lo menos 4 ó 5 meses se quedaron sin recursos para repartir cosas", pero a la vez criticó que en su momento se repartieran medicamentos "porque vos no sos médico ni farmacéutico, no podes hacer eso. Yo que vengo del área de la salud sé cómo funciona". 

"Las acciones que a veces hace Daniel como alguna raviolada con pollo, eso lo consigo yo. Y aparte él por su cuenta obtiene recursos, porque tiene toda una red solidaria de gente que se conecta. Es decir, hace la función que tendría que hacer un concejal y los concejales no hacen. Porque van, se sientan en la banca, levantan la mano y ya está. Por eso digo que son plantas, el problema es que a las plantas en algún momento las tenés que podar porque las ramas crecen para todos lados", agregó sin pelos en la lengua.

Qué se dijeron en los audios 

En el audio inicial, además de lo descrito anteriormente, Kubar detalló que su decisión no era "nada personal con vos, pero aguanté tres meses a ver si podías hacer algo y nunca vi una actitud tuya para tratar de frenarlo. Yo no puedo soportar esto como conductor político, de que vos tengas un militante tuyo, una persona de confianza tuya, que lo único que haga sea agredir. Así que te voy a dar de baja la coordinación y la va a ocupar Carolina Ramírez".  

La respuesta de Learreta fue tajante y respondió con un tono notablemente disgustado: "Esta es una decisión política tuya Darío, vos no sabés lo que yo pude haber hablado en privado, pero si vos me das de baja... No hay problema".

Kubar le dijo que "no va a faltar oportunidad para conversarlo, pero la realidad es que ya me excedió todo esto. Este pibe, nosotros no le hicimos nada para que nos basuree así y vos sos su sostén político. No puedo dejar que me vapuleen todos los días".

Learreta le reprochó que la decisión "me la tendrías que haber dicho personalmente en la oficina" y luego le dijo que "después de esto terminamos, indudablemente es una cuestión personal conmigo. Así que bueno, nos veremos en la calle. Hasta luego".

El ex intendente le respondió: "No es un tema personal Eduardo, pero hay que hacerse cargo, hermano. Este pibe se la pasa tirando mierda. Venite a la oficina y no tengo problema en hablar con vos". Y terminó con un tono más agresivo: "Pero no me amenaces porque no lo voy a tolerar. Vos no hiciste nada para frenar a este pibe que se la pasó insultándonos. Vení a la oficina ya, o si no, decime donde estás que voy a buscarte".

El último audio que se viralizó es la respuesta de Learreta: "Yo no te estoy amenazando, te hablo de la calle política. Pero vos antes me tendrías que haber citado, vos sabés lo que he trabajado para vos. La que nombraste está con Marcelo Basilotta, abrí los ojos".

"Me sentí amedrentado" 

El ex funcionario municipal reveló que en las últimas horas, totalmente casual, hubo un reencuentro con el actual concejal opositor: "nos vimos cara a cara. Fue muy parco, muy serio. Yo estaba con otra persona. Lo único que te puedo decir es que a mí no me van a amedrentar. En el fondo de todo esto te digo que yo tuve un gran aprecio con Darío, de la noche a la mañana ese aprecio desapareció. Hoy estamos en veredas opuestas". 

"La mayoría del bloque de la oposición es un cartón pintado que no tiene referencia a nivel nacional. La gente no votó eso. La gente votó a Juntos. De pronto le cambió el nombre por su agrupación de entre casa, y arrastró a los demas concejales pero porque ellos quieren hacer ese papel", aseveró sin titubear. 

Dejó al margen de esos concejales a Daniela Oroño ("tengo que reconocer que trabaja mucho") y a Ariel Martínez ("trabaja bastante en algunos temas"): "el resto son plantas, se sientan ahí, levantan la mano, bajan la mano. ¿Vos lo escuchaste hablar a Ricky Núñez alguna vez? La vez que tuvo que decir algo, lo leyó y se equivocó. Después a (María Laura) Coratti la quiero, pero tiene que tener algo de amor propio y no decir a todo que sí. Creo que la gente no votó para esto, realmente votó otra cosa. Y sé que hay problemas internos, es un espacio que está como crujiendo. Si llegas a hacer un acuerdo con la intendencia, por lo menos que no se note", remarcó.  

-¿Cuál es el acuerdo que por ahí notás? ¿Tiene que ver con el oficialismo?

-No sé, desconozco, pero siempre Darío habla de ir por el medio, del diálogo y todo eso. Ya tuvimos un candidato presidencial que decía eso y fracasó. La gente no está esperando eso.

En ese último ítem lo diferenció de Basilotta porque "tiene otra forma de hablar totalmente distinta. No hay que putear por putear, pero hay que reclamar. Darío dijo un día que negociaba con el intendente en privado y que se peleaban en privado. Pero la gente quiere verlo públicamente. Las cosas entre cuatro paredes no van. Porque la oposición está para plantear el debate en el Concejo, si no ¿para qué está el HCD?".  

Retomando la cuestión del reencuentro con el ex jefe comunal, se sinceró: "yo fui el menos amedrentado. Pero la sensación que tuvo toda la gente que estaba en la estación de servicio, y el comentario posterior, fueron tremendos. Se sintieron avasallados, invadidos, y los empleados también. Me lo dijeron. Darío entró con el hermano (Lucas Kubar). La verdad no sé por qué está tan nervioso últimamente". 

"Yo nunca pensé verlo a Darío en esa postura. Yo no ligué la peor parte pero me sentí mal, me sentí amenazado también", ahondó. Y dejó entrever que la persona que lo acompañaba era alguien que se alejó del espacio en los últimos meses, cercana a Basilotta. 

El rol de su mujer 

Prosiguiendo con la entrevista en el streaming de La Posta Noticias, Eduardo Learreta indicó que "su mujer (Natalia Ruiz) me empezó a manejar la campaña en un momento y fue vergonzoso. Ya con los discursos, donde no lo dejaba hablar a él, juntaba 20 ó 30 personas en un barrio, Darío empezaba a hablar y ella se ponía adelante y seguía, pensaba que ahí ya estábamos mal". 

Y fue más punzante aún al afirmar que "Natalia no está bien vista ni siquiera en su barrio. Te lo dice cualquiera, yo no estoy mintiendo. Yo no tengo nada contra ella que siempre me trató muy bien. Ella me convocó cuando Darío tenía que ir a la reelección para caminar La Fraternidad y Raffo, y lo caminé. Yo caminé mucho por ellos".   

Aclaró que "esto no va por el tema plata, sino por el tema del trato. No voy a permitir que sea Darío Kubar o quién sea me grite. No me gritaron mi padre ni mi madre, menos vos Darío", dijo mirando a la cámara y desafiante. 

La "operación Basilotta"

En el último tramo de la charla se explayó sobre la salida de Marcelo Basilotta de Nación y expresó que las dudas no vienen de una operación que le haya armado el oficialismo: "no viene de ahí. El run run está, pero yo lo único que dije en una nota que me hicieron para Radio Municipal es que Maggi había averiguado, porque lo dijo en la radio, que vendría del espacio kubarista. Eso lo dijo Maggi, yo puedo pensar lo mismo o no. Pero yo no lo dije. Aunque creo en el fondo que puede ser que haya sido una operación hecha por Darío".  

Y reiteró en que fue una cuestión de celos: "parece una pendejada. Los dos eran un equipo muy bueno. Está bien que Marcelo tuvo muchos problemas con Natalia. Y vuelvo a tocar a Natalia porque es una concejal, y todos los que se meten en la política tienen que estar preparados para aguantarse lo que venga".  

Sobre el tema de la llegada a Jorge Rial para el armado del informe en su programa "Argenzuela" por C5N, simplemente esbozó sonriendo: "llegó. No es ningún amigo de Darío tampoco, a lo sumó le habrá pasado el teléfono. Pero por lo que dicen las versiones viene de una actitud del candidato, del político en jefe", sembró el interrogante. 

Oposición no tan oposición 

Para culminar, hizo hincapié en la particular relación "casi amistosa" entre oficialismo y oposición en el distrito, encabezada por Mauro García y Darío Kubar: "a lo mejor está desganado y desgastado. Hay que ver cómo piensa él. No sabría que decirte. Hacer una campaña produce un desgaste. Por eso te digo que fue una pésima campaña porque cuando me entero que la jefa de campaña iba a ser Natalia, sabía que perdíamos de entrada".  

"Yo me iba a ir en este mes de junio. Por lo menos tuvo la cortesía de llamarme Darío y de decirme que me echaba. En otros casos ni los notificó y la pobre gente estuvo 15 días más sin saber que habían sido echados. Ni se enteraron que ya les habían dado la baja", contó. 

Y refirió diciendo que participaría en un espacio libertario: "en un espacio liberal más que nada. Yo voy a estar atrás de la construcción de ese candidato en Rodríguez. Por ahora libertarios reales no veo. (Matías) Ledesma es muy nuevo. Porque a Milei no le importó nada el armado en la provincia. Te lo dicen los mismos libertarios. Ni él calculaba que iba a ganar".  

"Hay cosas que no tienen retorno. Porque sino no sería una planta, sino una papa. Igual a Darío lo sigo apreciando, porque en el fondo puede ser mi hijo. Calcula que tiene 40 y pico de años, yo tengo 70. Pero ahora igual ya es tarde", cerró sobre si habría algún punto de retorno en su relación con Darío Kubar.