En marzo, algunos beneficiarios del SAE habían reclamado el dudoso estado de las cajas de tomate triturado, algo que se repitió este mes. Por tal motivo, la concejal Laura Coratti elevó un pedido de informes y reclamó más controles, mientras que su par Silvia Figueiras leyó la justificación de los proveedores y resaltó el rápido accionar de las áreas municipales.
En el marco de la polémica instalada desde el mes de marzo, cuando ciertos beneficiarios denunciaron que algunas cajas de tomate triturado provistas por el Servicio Alimentario Escolar (SAE) no estarían del todo en buen estado y plantearon sus dudas al respecto, en la sesión del HCD de este jueves 11 de abril hubo debate, justificaciones por parte del oficialismo y reclamos por parte de la oposición.
En concreto, la situación se originó una vez comenzado el ciclo escolar cuando se entregó este lote de tomate triturado al que accedieron las familias de los niños y niñas de algunos establecimientos educativos, quienes mostraron desconfianza al notar como "tiritas de color amarillo" flotando en el tomate triturado. Los vecinos señalaron que el Municipio les pidió la devolución de la mercadería, pero que en la entrega correspondiente al mes de abril, días atrás, hubo cajas de tomate triturado que aparentemente serían del mismo lote (N.º 2317).
Fue así que María Laura Coratti, la edil de Juntos por el Cambio, presentó un pedido de informes para que se aclare la situación y para saber si este procedimiento está avalado por el Código Alimentario Argentino, encajando dentro de su reglamentación.
A su turno, la concejal de Unión por la Patria y presidenta del bloque, Silvia "Chifu" Figueiras, dio una justificación detallada, a partir de las áreas comunales intervinientes, y explicando que había reportes también de las propias empresas. En ese sentido, remarcó que "trabajamos con dos proveedores, uno de primera calidad, que es Marolio y el otro entrega productos muy buenos. El problema lo tuvimos con ese".
Lo cierto es que es algo que preocupa, por el estado en que están y llegan las cosas, y también por saber qué clase de coordinación hay para que se retire un lote y luego se vuelva a dar el mismo lote.
Quizás no había a ciencia cierta un problema o una situación de gravedad con respecto a esos productos alimenticios, de hecho la legisladora Figueiras concretamente consideró que no se trataba de algo que tuviera algún riesgo, sino que esa presentación era a raíz de que el tomate triturado mantiene las semillas, y las semillas luego germinan. Hay un límite en el cual puede haber algo germinado, lo cual está regulado, y en todo caso hay que ver si el largo de esas "tiritas" de las que reclamaban los beneficiarios, era lo suficiente para pasarse del nivel de control.
"No eran bichos, no eran gusanos como decían, sino que tenían que ver con la germinación de la semilla", enfatizó. Y ponderó la rápida intervención de las secretarías correspondientes en favor de la tranquilidad de las familias.
Algo que llama la atención es que, teniendo la fábrica de Marolio en el distrito, este alimento venga del otro proveedor en cuestión. Cuestiones relacionadas intrínsecamente con los precios y también con la calidad de los productos. Seguramente esta respuesta deberá llegar del pedido de informes que se aprobó.
Así las cosas, el cuerpo deliberativo avaló el pedido de informes, pero se estima que en los próximos días estará todo solucionado y que simplemente se hará una revisión para que cuando vuelva a entregarse esta mercadería no haya ningún tipo de sobresalto.