Desde las redes oficiales del club rodriguense se expresaron en las últimas horas sobre la situación tensa que vivieron jugadores, cuerpo técnico y dirigentes luego del partido del sábado pasado ante el "Verde" como visitantes
Leandro N. Alem ya está pensando en lo que será el cotejo de este sábado frente al escolta del campeonato General Lamadrid desde las 15 hs en nuestra ciudad. Sin embargo, en la tarde de este miércoles, la Comisión Directiva del club emitió un contundente comunicado con relación a una situación por demás incómoda y hasta peligrosa que vivieron plantel, cuerpo técnico y dirigentes el último sábado luego del empate ante Ituzaingó como visitante.
Si bien es cierto que el mote de clásico queda muy grande, que el verdadero clásico del "Lechero" es Luján y el del "Verde" es Midland, no podemos negar que hay cierta rivalidad entre los dos clubes, una de las tantas entre clubes de la zona Oeste.
Pero no hace falta aclarar o, mejor dicho, ni siquiera haría falta aclarar que absolutamente ninguna rivalidad o circunstancia justificaría algún tipo de agresión o violencia. En ese sentido, según lo que trascendió recién en estos últimos días, y que manifestó la CD por medio del comunicado oficial, los integrantes de la delegación "zafaron" por muy poco de ser agredidos, retirándose del estadio Carlos Sacaan casi como criminales, dado que salieron por el mismo lugar en que se retiraba la parcialidad local.
Afortunadamente no hubo heridos, aunque no deja de ser un llamado de atención. No solo para Ituzaingó, sino para todos los clubes del fútbol argentino, que a menudo ven cómo se empaña lo que debería ser una fiesta por este tipo de hechos.
"Fue algo extraño"
El secretario de la institución, Cristian "Mili" Espósito, habló sobre lo sucedido esta mañana en Radio Municipal (FM 89.5) donde detalló cómo fue toda la secuencia en la tarde del sábado y el mal momento vivido por la delegación. "Fue algo extraño. Yo si quiero ir a la cancha de Ituzaingó y que no me tiren ninguna piedra, y quiero salir y que tampoco me vuele ninguna piedra, yo sé por dónde entrar y por dónde salir", expresó.
"Después cuando llamé a la gente de Ituzaingó explicándole lo que había pasado, porque tengo buena relación con ellos, me dijeron que habían pagado 30 policías más y que el jefe del operativo policial no estaba en la cancha", deslizando que era responsabilidad del cuerpo policial.
Espósito señaló que afortunadamente los proyectiles no lastimaron a nadie, más allá del susto natural por la situación, y que tampoco llegaron a romper los vidrios del micro, si bien hubo uno que quedó marcado "porque tiraron las piedras de cerca, si hubieran tirado de lejos lo hubieran roto".
"Muchos me dijeron '¿no filmaste nada?' Flaco yo estoy manejando el colectivo, mira si me voy a poner a filmar si me tiran piedras o lo que sea", aseveró el dirigente y aclaró que habló con el presidente del "Verde" y le dijo que "yo tampoco les voy a jugar con eso de que cuando vengan acá les tiramos piedras. Nosotros no somos así. Si vos me tiras piedras, vas a quedar mal vos. A nosotros nos hicieron la vida imposible para entrar, para salir, para estar ahí en la cancha, ni siquiera dejaron estar en el hall al técnico. Nosotros dejamos entrar a todo el mundo acá, los dirigentes hasta entran en la cancha".
Antecedentes de mucha violencia
Hace más de veinte años que hay una guerra declarada entre las barrabravas de Alem e Ituzaingó. El 30 de noviembre de 1996, un joven llamado Carlos "Tuerca" Villalba, hincha del Verde de 22 años, era uno de los tantos que viajaba en el micro escolar que pasó por General Rodríguez en un sábado de ascenso en el que ni siquiera se enfrentaba su equipo con Alem.
El micro fue atacado por un grupo de hinchas de Alem que los emboscó y les arrojó piedras, hierros y bulones. Villalba iba en el estribo y lo impactó un proyectil en la cabeza. Terminó muriendo en el asfalto.
En el medio hubo otros partidos que, por las escasas medidas de prevención, no iban los hinchas visitantes (aún cuando estaba permitido) o simplemente se postergaban hasta que el resultado se definía en un escritorio.
En 2013, cuando ambos militaban en la Primera D, y el "Lechero" era dirigido por el ídolo Carlos "Lobo" Cordone, a los 35 minutos del primer tiempo, después de haberse puesto en ventaja el equipo visitante, el partido debió suspenderse por incidentes en la tribuna del "Verde" y una amenaza de invasión en el campo de juego.
"Los hinchas quisieron meterse en la cancha. En la semana nos dijeron que si sacábamos un resultado positivo las cosas se iban a complicar. Los chicos de Ituzaingó nos llevaron a su vestuario y nos quedamos ahí hasta que trajeron otro micro, porque el nuestro lo rompieron todo", había señalado en aquel entonces Jonathan Di Toro, jugador de Alem.
Ese día Cordone, hincha acérrimo del "Lechero" estaba en la tribuna del local y por muchos presentes fue sindicado como el responsable de iniciar los incidentes. El ex jugador de Racing y Vélez le ganó un juicio al diario Olé, ya que según el juez entendido en la causa lo acusaban falsamente por colgar una remera del alambrado con una leyenda recordatoria de la muerte de Villalba. Cordone justificó que la remera tenía la inscripción de “La 25” su banda de rock favorita. Aquella tarde todo terminó en bataola generalizada en las afueras del estadio entre la policía y las hinchadas que intentaron cruzarse luego del hecho anteriormente destacado.
Qué dice el comunicado
El sábado 01/06 luego del partido que disputó el equipo de primera división frente al Club Ituzaingó por la fecha 20 del torneo de la primera C 2024, en condición de visitante, cuando el plantel de Alem se retiraba del estadio de Ituzaingó acompañados por el cuerpo de motos policiales, hicieron salir al micro que llevaba a nuestra delegación, compuesta por jugadores, cuerpo técnico y dirigentes por el mismo sector por donde se desconcentraba la parcialidad local.
Estos, al darse cuenta empezaron a arrojar todo tipo de proyectiles (piedras, palos, botellas) causando por suerte solo daños al vehículo, teniendo tanto los jugadores y cuerpo técnico que tirarse al suelo para no ser agredidos.
Desde la comisión directiva del club lamentamos los hechos sucedidos y esperamos que solo haya sido una decisión equivocada haber hecho salir el micro visitante por medio de la parcialidad local.
Atte Comisión Directiva CDMA.
