"Fue maldad": la sospecha de un vecino tras el incendio de su casa en el barrio Parque Irigoyen
El domingo 9 de junio por la madrugada, se incendió una casa ubicada sobre la Ruta 7 y la calle Manuela Maison. La sospecha del vecino dueño de la vivienda, que perdió todo lo que tenía.
Oscar Ayala salió de su casa el sábado por la noche, cerca de las 22.30 horas y estuvo en Luján hasta la madrugada del domingo. Volvió en su auto y al llegar, a las 3.15, se encontró con que su casa se estaba prendiendo fuego. De hecho, le dijo a La Posta que "mientras iba por la Ruta 7 iba junto a los Bomberos que se acercaban a mi domicilio. Cuando llegamos, ya estaba la Policía en la puerta".
Aunque los Bomberos trabajaron y apagaron las llamas, Oscar perdió todo lo que tenía dentro. "La heladera, el lavarropas, la cocina, la moto que tenía, la mesa, mi cama, todo, no sirve nada. Perdí todo. Y estoy desocupado, no tengo ningún ingreso de dinero para comprar de nuevo esas cosas, sé soldar y hacía changas para vivir".
Mientras espera por ir al cuartel de Bomberos a buscar el certificado por el incendio, unos detalles que encontró en su casa incendiada le preocupa: cree que el incendio fue intencional. "En la habitación, los cajones estaban tirados en el piso y la ropa también. Estaba todo revuelto. La ventana tenía abierta la hoja de la derecha, corrida hacia la izquierda, cuando siempre la abro al revés. Por ahí entró alguien. Pero no se llevaron nada, no faltó nada. Solamente no encuentro la motosierra que tenía, pero puede haber quedado debajo de escombros que aún no removí. Finalmente, en el alambrado perimetral, cerca del portón, había una parte hundida que parecía haber sido pisada desde adentro. Creo que quienes estuvieron haciendo esto pueden haber salido por el frente".
Finalmente, Oscar cerró con que hay un vecino que tiene una cámara que apunta a su portón delantero, pero "no se ve nada en las filmaciones" y que "yo viví toda mi vida en General Rodríguez, me conoce mucha gente, pero mi círculo íntimo es muy chiquito. A mi casa no entra nadie más que mi hijo y yo. No tengo enemigos. Si tuviera que pensar quién fue, podría tener una sospecha sobre alguien, pero no tengo pruebas. Esto fue pura maldad, me arruinaron".