Más reclamos por el Cementerio tras el Día del Padre y Pascuas: una familia debió cavar para el entierro de su padre
Siguen los reclamos de vecinos por el mal estado del predio ubicado en Avenida de las Américas y Luis Agote, así como la falta de autoridades presentes en el lugar. Este último fin de semana, en ocasión del Día del Padre, hubo innumerables quejas por distintas situaciones que vivieron las familias y dos de ellas dieron su testimonio en Contame La Posta; una contó que en Pascuas tuvieron que cavar el pozo de su padre.
En el marco de un día tan especial y simbólico desde lo afectivo como es el Día del Padre, toma quizás una mayor trascendencia lo ocurrido para muchas familias rodriguenses este fin de semana. Reclamos que nunca se fueron, pero que vuelven a estar en el ojo de la tormenta a partir del estado del Cementerio municipal y su abandono, así como también la ausencia de autoridades en el lugar a la hora de solicitar alguna inmediata respuesta o explicación.
Como siempre, las redes sociales fueron el medio más recurrente para que los ciudadanos rodriguenses se expresaran y manifestaran sus sensaciones, por lo que les tocó vivir en primera persona. Y, en este sentido, uno de los testimonios más impactantes fue el de Natalia Escobar, quien hace más de dos meses perdió a su padre "y tuvieron que paliar mis hermanos para enterrar a mi viejo, una vergüenza. Los que trabajan ahí no saben el tamaño de un cajón, una falta de respeto", de modo que en la última visita que hizo este domingo reiteró que "el cementerio es un abandono total. No queremos dejar nada sin hacer, su casita con candado y todo, porque te roban y te rompen todo".
(VER EL VIDEO DEL MOMENTO EN QUE LOS FAMILIARES DEBIERON CAVAR EL POZO)
En charla con Contame La Posta en la edición de este jueves, la vecina se explayó sobre lo sucedido el fin de semana extra largo de fines de marzo: "por ese tema del feriado largo lo enterramos a mi papá recién el miércoles. Fue tremendo porque mi papá fallece el sábado (30 de marzo), lo velamos el domingo (31) y lo enterramos recién el miércoles (3 de abril). Nuestra bronca fue llegar ese día que llovía torrencialmente al Cementerio, después de esperar tantos días para enterrarlo, y que mis hermanos tengan que hacer el pozo, porque el personal que había eran tres hombres, con un olor a alcohol tremendo, y cuando lo fuimos a enterrar no cabía en el pozo. Yo supongo que una persona que trabaja en el Cementerio tiene que saber las medidas de un cajón".
Sobre el estado de los empleados presentes, ahondó: "en primer lugar agarraron el cajón para meterlo y no entraba, lo zamarreaban a mi viejo para todos lados, cosa de que el cajón entre donde no iba a entrar, y mi hermano mayor agarró la pala él mismo para empezar a enterrar a nuestro propio viejo. Un horror. Ellos no atinaron a hacer nada".
"Este domingo (Día del Padre) fuimos, porque estamos yendo casi todos los domingos, y no había nadie. El Cementerio está en total abandono. Cuando remueven a los que estaban, no levantan las tumbas, no limpian la tierra, te entierran en el mismo lugar. O sea, es horrible", cerró.
Robos y "acefalía"
Tal cual lo dicho anteriormente, el domingo 16 de junio fue una jornada angustiante para muchas familias que se acercaron a recordar a sus seres queridos al Cementerio municipal porque, no ajeno a lo que viene ocurriendo desde hace bastante, tuvieron el desagrado de encontrar faltantes en los nichos, en las tumbas, áreas vandalizadas, o no encontraron empleados a quienes reclamarles.
En el caso de la vecina Mariana Bonino, comentó que en ocasión del Día del Padre, junto a su madre y su hijo fueron a visitar a su papá que falleció hace 6 años, encontrándose con la desagradable sorpresa de que tanto las placas como las flores y demás ornamentaciones que tenía se lo habían quitado. No conforme con eso, en el lugar se encontraron con un desconocido: "se nota que estaban arrancadas las placas y hay otra persona pegada en la pared. Fue un momento muy angustiante, mi mamá se empezó a hacer sentir muy mal y yo también me descompuse".
Acto seguido, dijo que además de transmitirle algo de tranquilidad a su madre, comenzó a caminar para ver si encontraba a alguien responsable del lugar y obtener alguna respuesta, pero "no encontré absolutamente a nadie. Nadie. Todo cerrado. Una persona en situación de calle que estaba ahí pidiendo dinero nos dijo que el Cementerio no es lo que era antes, que venían a abrir a la mañana y después venía alguien a cerrar".
Por otro lado, mencionó que intentó localizar a la persona encargada del espacio hasta que se enteró de que era Guadalupe Udaeta la directora, y se comunicó para intentar obtener alguna explicación de lo sucedido "y me dijo que no estaba en el distrito, pero me manifestó que pudo haber sido un error y hay gente que viene a poner placas y se confunde".
La mujer aclaró a La Posta Noticias que habló con Manuel Anigstein, presidente del Concejo Deliberante, "que se puso a disposición, me pidió disculpas, aunque no era el encargado del lugar. Guadalupe (Udaeta) también me atendió bien, pero no se encontraba en el distrito, por lo cual me preocupa la situación del Cementerio porque me dijo que no tenía empleados, que tenía solamente una persona, y es algo grave porque vemos que suceden cosas y hay denuncias constantes. El Municipio de General Rodríguez, que tiene que velar por la seguridad del lugar donde descansan nuestros seres queridos, no la está garantizando".
-¿Cuándo vos hiciste la publicación, qué pensás de todos los comentarios que después se originaron?
-Sinceramente a veces uno escucha y lo ve a diario que transita diferentes lugares como docente, pero hoy por hoy no puedo creer la gravedad de que el organismo municipal no tenga ningún empleado, nadie administrativamente para dar una respuesta. Ni la directora, ni nadie del personal.
En el streaming de La Posta Noticias, la vecina agregó que "el día miércoles Guadalupe Udaeta me mandó un mensaje diciéndome que me estaba esperando y yo no había ido. Pero yo la verdad no fui porque estaba esperando alguna respuesta. Ella me pidió los datos, me pidió un certificado de defunción, una boleta de pago, un montón de cosas que le pasé el mismo Día del Padre. Luego me levantó la voz, me gritó por el celular diciéndome que me estaba esperando hace tres días y me hizo llorar".
"Para mí lo sacaron y pusieron a otra persona, porque no hace mucho que fuimos y las marcas ahí se ven como sacadas. Se pueden haber equivocado, pero quién me garantiza a mí de que cualquiera entra al cementerio, te arranca la placa y te pone la placa de otra persona. Y si hubiera sido falta de pago, nunca hubo una notificación al respecto. Pero lo más grave de todo para mí es que el cementerio no tiene personal, el Día del Padre, un domingo, todo el cementerio abierto es una locura. Es como que yo deje la escuela abierta con todos los chicos deambulando por el patio solos", completó.