Un joven permanece con pronóstico reservado tras un accidente entre un automóvil y una bicicleta en Ruta 7
Por lo que se pudo saber, el siniestro vial se produjo este domingo, pasadas las 3 de la madrugada, en inmediaciones de la Ruta 7 y la calle Guido y Spano, cuando un auto embistió a una bicicleta en la que viajaban dos personas. La mujer que manejaría la bicicleta sufrió múltiples heridas, aunque fue dada de alta horas después, mientras que el muchacho fue intervenido quirúrgicamente y no se conocieron más detalles.
En la madrugada del domingo, aproximadamente a las 3 de la mañana, un automóvil Chevrolet Corsa Weekend de color gris atropelló a dos personas que iban en bicicleta por Ruta 7, a la altura de la calle Guido y Spano, en inmediaciones del barrio Parque Joly.
De acuerdo a la información trascendida en un primer momento, ambos ocupantes de la bicicleta sufrieron fuertes heridas y fueron trasladados de urgencia por una ambulancia del SAME al Hospital Vicente López.
La mujer, de 35 años e identificada como Silvina Aguirre, era quien conducía el rodado y sufrió policontusiones producto del impacto, aunque ingresó consciente al nosocomio y fue dada de alta horas después.
Pero el muchacho de 29 años que la acompañaba a bordo, de nombre Ezequiel Adrián Ibáñez, se llevó la peor parte, ya que, además de ingresar al hospital por politraumatismos severos, habría sufrido un hematoma subdural por el choque, de modo que tenía sangrado en la cabeza. A raíz de esto, fue intervenido quirúrgicamente por el servicio de neurocirugía del Vicente López, aunque tras esto no hubo mayores detalles de la evolución posterior a la operación. Por el momento, no trascendieron más datos y habrá que ver si luego hay más datos oficiales, algo que depende el caso, se está complicando bastante de obtener en algunos organismos oficiales como las comisarías.
Lo único que trascendió hasta este momento es que los ocupantes de la bicicleta volvían de festejar el día del amigo y fueron atropellados por el auto, aunque se desconocen las circunstancias en que sucedió todo. Si fue por una mala maniobra de alguno de los protagonistas de este siniestro, si fue por una cuestión de poca visibilidad en la zona (siendo que era plena madrugada), o bien por algún otro factor que pudo haber influido. Una versión extraoficial mencionó que allí hay un camino que hacen las bicicletas para cruzar desde o hacia el Raffo por encima de las vías y que puede que el vehículo no haya podido advertir a la bicicleta a tiempo y de allí que quedó en ese estado el parabrisas del auto.
Lo cierto es que en el lugar del impacto, esta tarde no se hallaron cristales del auto que evidenciaran el choque, solamente una cinta de peligro que usualmente se suele poner cuando hay cortes, dividir espacios o proporcionar advertencias.
