Sociedad 28 OCT 2024

Sentencia a L-Gante: condenado, pero libre

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Elián Valenzuela, artista local de la "Cumbia 420", fue absuelto de la acusación de Privación ilegal de la libertad, pero condenado a la pena de tres años de prisión en suspenso por los delitos de amenazas y daños. El juez recibió criticas de varios sectores y medios por el modo en el que lo comunicó.

Este lunes 28 de octubre el Tribunal en lo Criminal N.º 3 de Mercedes condenó al cantante Elián Valenzuela, más conocido como L-Gante, a la pena de tres años de prisión en suspenso y costas "por ser autor penalmente responsable del delito de amenazas coactivas, amenazas calificadas por el uso de armas, amenazas simples y coautor penalmente responsable del delito de daño", mientras que fue absuelto por el delito de privación ilegítima de la libertad.

¿Qué solicitaban la fiscalía y la querella?

La fiscalía había solicitado que el músico sea condenado a siete años de prisión por amenazas agravadas y daños, mientras que la querella había pedido ocho años cárcel efectiva al "entender la carencia de antecedentes penales por parte del acusado y sumar los agravantes correspondientes".

La defensa, en tanto, había solicitado la absolución de L-Gante, quien fue investigado por la Justicia de Mercedes por los delitos de "amenazas, privación ilegal de la libertad, amenazas calificada, tenencia simple de estupefacientes y encubrimiento calificado", a partir de una denuncia de Gastón Torres, vecino de la familia de Valenzuela.

Los motivos que dio el juez para dictar la sentencia

El dictamen de Valenzuela tuvo lugar luego de la valoración hecha por parte del juez Ignacio Racca. “Es muy común que nos encontremos con un caso como el que nos encontramos hoy, distintas hipótesis, distintos hechos. No podemos investigar eternamente, comentó ante los presentes en la sala y continuó: “Hay una diferencia entre creer y aceptar. Hay ciertas proposiciones que se dieron por acreditadas, otras no... Es preferible absolver a un culpable que condenar a un inocente”.

Sobre la pena de prisión en suspenso, el magistrado explicó: “Está claro que Valenzuela no tiene antecedentes penales, que el entorno carcelario podría ser muy perjudicial para él, afectando negativamente sus posibilidades de reinserción", al tiempo que recordó que "no es una cuestión solamente de Valenzuela, sino que en penas cortas está desaconsejado la prisión de efectivo cumplimiento para el desarrollo social y laboral". 

"Valenzuela tiene una influencia significativa sobre su entorno. Es visto como un modelo a seguir. Se habló mucho de poder en este juicio. Y un gran poder conlleva una gran responsabilidad, por eso es el deseo y propósito de este veredicto, y centralmente de la modalidad de la pena, que termine de asumir un rol de modelo para la juventud, sobre todo la juventud que lo admira, por lo menos en lo que nos interesa a nosotros, que es el cumplimiento de la ley", cerró el juez. 

El magistrado dispuso que L-Gante debe cumplir las siguientes obligaciones:

- Fijar residencia y someterse al cuidado del Patronato de Liberados.

- Hacer saber al tribunal de forma previa a cualquier tipo de egreso del país.

- Abstenerse de tener cualquier tipo de contacto con Darío Torres, Braian Aruchari y Daniela Vicente, como así también con sus grupos familiares. 

- Efectuar una donación monetaria a alguna organización de bien público de nuestro distrito, con coordinación del Patronato de Liberados.

Tras salir de la audiencia y escuchar el fallo, L-Gante sostuvo: “Estuvimos a disposición, con respeto a su señoría, agradezco su buen trabajo. Esto no termina acá. Falta más en la búsqueda de mi inocencia. Las palabras que dijo el juez son muy motivadoras para mí, ojalá algún día sea un gran ejemplo para la juventud Aún puedo confiar en la Justicia”.

En cuanto a las lecciones que aprendió durante este proceso, el artista mencionó que ha tenido que distanciarse de ciertas personas que buscaban beneficiarse de él: “Filtré varios amigos que querían sacar beneficios, por lo que quedarán solo con recuerdos de mí”.

El joven sostuvo que se sintió traicionado y extorsionado. “Siempre estuve tranquilo. No tuve miedo en volver a la cárcel”.

Y cerró: "Quiero decir que esto no se termina acá y queda tiempo para que demuestre mi inocencia. Todavía falta para dejarlo en claro. Que quede en claro que fue algo armado para sacar un beneficio a favor del denunciante y la querella”.

Fuente: Página 12