La historia de las hermanas que revolucionaron un barrio por su amor al deporte

Julieta (23) y Lucía (21) trajeron a General Rodríguez la medalla dorada en sus respectivas categorías en el Campeonato Nacional de Clubes de Patinaje Artístico desarrollado en Río Segundo, Córdoba, y en la última emisión de Contame La Posta (La Posta TV) contaron su historia.

Durante la segunda semana del corriente mes, se llevó a cabo el 1º Campeonato Nacional de Clubes de Patinaje Artístico en la ciudad de Río Segundo, provincia de Córdoba. Y hubo dos hermanas de General Rodríguez que hicieron historia al haber conseguido medallas doradas en cada una de sus categorías. Ellas son Julieta Jazmín Pérez (23 años), en la Primera C, y Lucía Agostina Pérez (21), en la Segunda C, ambas del barrio Marabó y profesoras de la escuelita que funciona en el Polideportivo Municipal de la zona.

Durante la última emisión de Contame La Posta (La Posta TV), las patinadoras de Marabó manifestaron sus sensaciones tras el histórico logro, con el plus de haber podido emprender la travesía juntas. Mientras Julieta dijo que “la experiencia fue única”, Lucía agregó: “Fue increíble la experiencia. Y compartirlo juntas fue súper lindo”.

“Arranqué cuando tenía cuatro años y Lu tres. La decisión la tomamos en familia y fue la mejor que pudiésemos haber tomado”, remarcó Julieta.

Lucía, no obstante, recordó los obstáculos que se presentaron en el medio: “Dejamos de patinar cuando ella tenía 10 y yo ocho por un tema económico. En su momento ya no se podía bancar más la actividad, los viajes al interior”. “Cuando pasábamos por el club, llorábamos”, afirmó Julieta.

“Mi mamá dijo que íbamos a hacer un parate y que cuando nos acomodemos, volveríamos. Y cuando nos dijo para volver, volvimos al toque”, destacó Lucía.

A su vez, ambas recordaron lo que fue el entrenamiento en tiempos de pandemia por Covid-19. A raíz del confinamiento, las hermanas destacaron y valoraron el esfuerzo de sus padres para darles un regalo impensado. “En pandemia nuestros padres nos hicieron una pista para entrenar en casa”, añoraron.

Hoy, el presente es distinto. Pues, las hermanas ahora tienen su propia escuelita. “Hace un año y medio abrimos la escuelita. Arrancamos con 10 nenes y prestábamos todos los patines, comprados por nosotras mismas, después vino una donación que la aceptamos. Seguimos, y en noviembre del año pasado hicimos el primer show y explotó. Hubo ayuda de padres, de nuestras familias”, remarcó Lucía.

Por su parte, Julieta detalló: “Cuando arrancamos, lo hicimos de manera privada. Tras cuatro cinco meses de brindar clases gratuitas, empezamos a cobrar una cuota de $ 1.000 y los que eran hermanos pagaban solamente una. Fuimos arrancando así, luego subimos a $ 2.000 porque los patines pasaron de $ 30.000 a $ 60.000”, explicó.

“Hoy, la cuota está $ 3.000, y después del show la escuelita hizo mucho ruido y tuvimos la posibilidad de conseguir las primeras horas para mí, y hoy estamos peleando las horas para Juli. Todavía lo está gestionando la Municipalidad”, destacó Julieta.

Por último, anticiparon que este sábado, 30 de noviembre, se desarrollará un nuevo acto de cierre anual. “Va a ser desde siete de la tarde, con una propuesta de música disco, en el playón de Marabó”, remarcaron.